Tecno política

En este ambiente incierto y de emergencia sanitaria, ¿es lo más adecuado invertir en procesos electorales y de veeduría que permitan una mejor transparencia en el uso de los datos de los ciudadanos al momento de consignar el voto? Sí, siempre.

El voto electrónico se lo hace en la propia cabina y en las pasadas elecciones hubo un ensayo, que no se generalizó ni tuvo mayor eco. El voto por correo es una práctica que la tienen muchos países y funciona, siempre y cuando exista un servicio postal serio y sin deficiencias.

¿El voto desde casa por plataforma puede ser una opción? Tiene sus beneficios y perjuicios, pues permite hacerlo desde la comodidad de la casa, sin que la población de riesgo frente al Covid-19 se exponga, pero requiere de una sólida plataforma informática y un proyecto de seguridad integral, que no solo es un tema de infraestructura, sino fundamentalmente ético.

Adoptar formas variadas de consignar el voto debe ser un tema de investigación permanente del colegiado electoral, pero eso es pedir demasiado, pues son autoridades ocasionales que responden a consignas partidistas.

¿Y la campaña electoral? De seguro nuestros candidatos copiarán lo que se hace afuera. Ya estamos asistiendo a las convocatorias y movilizaciones, con uso de mascarilla partidista. Las plataformas digitales se abarrotan de encuentros y emisiones en directo. Veremos cuál es el candidato tiktoker más ridículo y veremos quién pelea más en Twitter, como si los likes fueran votos.

El uso de la tecno política debe ser estratégico, no solo para la campaña ni para el proceso electoral, también para los veedores ciudadanos. Es necesario que las organizaciones sociales desarrollen proyectos complementarios de contraloría y seguimiento en todo sentido: aportes económicos, mensajes, uso ético y respeto a las normas sanitarias, por redes, en plataforma propia y en la calle.

Con la tecno política todos somos activistas y militantes, y tenemos una identidad que va contra el voto secreto. Pero no todos están en espacios digitales, por ello la tecno política es complemento.