Parlamentarias en Venezuela: apoyo internacional dividido

Situación. Aún sin reconocer al Gobierno de Maduro, se espera una mediación para que las elecciones de la Asamblea tengan condiciones democráticas.
Situación. Aún sin reconocer al Gobierno de Maduro, se espera una mediación para que las elecciones de la Asamblea tengan condiciones democráticas.

La UE confía en que enviar una misión puede garantizar el proceso; EE.UU. insiste en que Maduro debe irse.

Una misión diplomática de la Unión Europa (UE) viajó ayer a Caracas, para tratar de promover unas «condiciones mínimas» para que puedan celebrarse unas elecciones legislativas «democráticas» en Venezuela, ya que a día de hoy los comicios previstos para el 06 de diciembre no podrían ser reconocidos.

«Una misión de la UE está en Caracas esta semana para mantener contactos con todas las partes, incluyendo las principales fuerzas políticas, la sociedad civil, académicos, el sector privado y la iglesia», indicó a Efe una portavoz comunitaria.

Dijo que la misión tiene lugar «en el contexto de los esfuerzos por promover unas mínimas condiciones democráticas antes de las elecciones legislativas».

Conformación

Dado que en las condiciones actuales la UE no iba a poder reconocer las elecciones del 6 de diciembre como legítimas y, por tanto, a la Asamblea Nacional resultante como representativa, lo que aceleraría la ruptura de Venezuela con la comunidad internacional, Bruselas emprende un último intento por mantener el diálogo para mejorar la situación sobre el terreno.

El envío de esta delegación se produce tras la reunión ministerial del Grupo Internacional de Contacto, impulsado por la UE con países europeos y latinoamericanos, que se celebró el 17 de septiembre por videoconferencia. También sigue al Consejo de Ministros de Exteriores Comunitarios del pasado lunes y de acuerdo al mandato dado al alto representante de la UE para la Política Exterior, Josep Borrell.

Petición de la oposición venezolana

El llamado G4, como se conoce a los cuatro principales partidos opositores con representación en el Parlamento venezolano, había solicitado a Borrell hacer de intermediario con el Gobierno de Nicolás Maduro para acordar unas condiciones mínimas para que decidieran participar en las elecciones.

Entre ellas, restituir a sus líderes y que se puedan presentar todos los candidatos de la oposición.

EE.UU. insiste en la salida de Maduro

Carrie Filipetti, subsecretaria adjunta para Cuba y Venezuela del Departamento de Estado de EE.UU., manifestó ayer la posición del gobierno de Donald Trump ante la llegada a Caracas de una misión diplomática de la Unión Europea.

“Alguien que es responsable de crímenes contra la humanidad, que está constantemente oprimiendo a su pueblo, asesinando a su pueblo, que persigue a sus oponentes, no puede permanecer en el poder, no puede supervisar ninguna elección parlamentaria o presidencial», declaró Filipett, quien señaló que «Nicolás Maduro necesita dejar el poder para que haya posibilidad de una elección libre en Venezuela”.

“Me preocupa que la comunidad internacional esté tan enfocada en la elección legislativa… posponerla no es la solución. Negociar con el régimen de Maduro no es la solución porque no se negocia con alguien tan decidido a permanecer en el poder que está dispuesto a asesinar a miles de personas para hacerlo”, remarcó la funcionaria del Departamento de Estado de EE.UU.