La advertencia de los incendios no es nueva, hoy devastan a América

El vínculo entre los efectos del cambio climático y los salvajes incendios es practicamente innegable.

San Francisco. Desde que se iniciaron la mayoría de los fuegos a mediados de agosto, más de una treintena de personas han fallecido en los tres estados de la costa oeste de EE.UU. -California, Oregón y Washington- decenas de miles de vecinos siguen evacuados y hay varias personas desaparecidas.

El humo es insoportable

Los múltiples fuegos emanan enormes cantidades de humo que cubren prácticamente la totalidad de los cielos de la región, y ciudades como Portland (Oregón), Seattle (Washington) y San Francisco (California) copan este domingo la lista de áreas metropolitanas con la peor calidad del aire del mundo.

Las previsiones meteorológicas, sin embargo, indican que el viento procedente del océano Pacífico podría empezar a soplar con fuerza a partir del inicio de semana y disipar parte del humo, por lo menos en las zonas más cercanas a la línea de costa.

Aún no llega lo peor

La mayor parte de los fuegos iniciaron el fin de semana del 15 de agosto a causa de una tormenta eléctrica nada habitual en la región en la que cayeron más de 10.000 rayos, y desde entonces la sequedad, los fuertes vientos y las altas temperaturas los han hecho extenderse a gran velocidad.

50 FALLECIDOS dejaron los incendios en el último mes, en EEUU; otros 50 desaparecidos han sido encontrados.Uno de los aspectos que más preocupan es que la situación pinta incontrolable aún no se ha llegado a octubre y noviembre, que tradicionalmente constituyen la ‘temporada’ de incendios en California.

Para los negacionistas

Científicos coinciden con que la sequedad del ambiente fue extrema en los últimos 12 meses, lo cual preparó las condiciones para los fuegos devastadores.

El presidente Donald Trump, negacionista del cambio climático, tenía previsto visitar la costa oeste ayer, luego de cumplir actos electorales en Nevada.

La fauna del humedal no tiene dónde esconderse

Redacción POCONÉ

Los habitantes del Pantanal de Brasil dicen que este es el peor incendio en los últimos 20 años. Con especies amenazadas de extinción, la fauna vive jornadas épicas por su supervivencia y evitar ser alcanzada por los incendios forestales que se arrastran en el mayor humedal del mundo y dejan desolada parte del bioma compartido con Paraguay y Bolivia.

En un escenario sombrío, con una inmensa cortina de humo y en el que las brasas elevan todavía más los hasta 43 grados centígrados de temperatura en la región, emergen los cadáveres de caimanes, aves de gran porte, venados, marsupiales, ganado vacuno y felinos que no consiguen escapar de las llamas.

Los pantanos secos y la calcinada vegetación se han convertido en un cementerio a cielo abierto para centenas de animales que mueren quemados en su frustrada huida del fuego y, así, los osarios expuestos cada vez son más comunes en un lugar que junto a la Amazonía es motor del ecoturismo en el gigante suramericano.

Los rápidos, corren

Algunos animales, generalmente los más rápidos, como venados, aves y felinos, consiguen llegar hasta la carretera Transpanteneira, para ser rescatados por voluntarios y ser llevados al único centro veterinario de atención que está operando.

800.000 HECTÁREAS de bosque húmedo se perdió al fuego en las últimas semanasEl Gobierno ha instalado desde finales de agosto un puesto para los animales que llegan heridos y los más graves son remitidos a Cuiabá, pero esto es eventual.

«No tenemos datos sobre la cuantificación de las muertes», señaló a EFE Karen Ramos Ribeiro, la veterinaria responsable del centro de acogida.

Reserva amenazada

Redacción LA PAZ

Las autoridades bolivianas activaron un operativo de emergencia para sofocar incendios que amenazan una de las principales reservas naturales del país, el parque nacional Noel Kempff Mercado.

La ministra interina de Medio Ambiente y Agua de Bolivia, María Elva Pinckert, se desplazó este lunes a la región oriental de Santa Cruz, donde están declarados 19 fuegos, para sobrevolar zonas afectadas y participar en la coordinación de labores de extinción.

Algunos de estos incendios están cerca del parque nacional, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, que con cerca de un millón y medio de hectáreas representa una de las principales reservas de biodiversidad del país, que incluye distintos hábitats como humedales de sabana y bosques secos, con especies como el jaguar.

El parque ya se vio amenazado el año pasado por grandes incendios que afectaron la zona, considerados uno de los peores desastres medioambientales de los últimos años en Bolivia, con millones de hectáreas quemadas en una zona de transición entre el Chaco y la Amazonía.