La mejoría se debe a un aumento en los aportantes voluntarios o sin relación de dependencia.
Desde noviembre de 2019, el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) ya enfrentaba una tendencia decreciente en el número de afiliaciones por mes. Esa realidad se profundizó y se hizo completamente negativa desde marzo de este año.
Así, hasta julio, más de 305.000 personas dejaron de ser aportantes activos. Eso quiere decir que, en promedio, se registraron 61.000 salidas del sistema durante los primeros cinco meses de la pandemia.
Sin embargo, Jorge Wated, presidente del Consejo Directivo del IESS, anunció que la curva descendente “comenzó a dar la vuelta”, y, por primera vez desde el inicio de la emergencia sanitaria se alcanzaron más afiliaciones que desafiliaciones en agosto.
Realidad
En términos netos, la seguridad social tuvo 22.194 afiliados más en agosto. Pero esto no significa que se solucionaron los problemas de falta de liquidez y sostenibilidad, porque esa pequeña recuperación no borra el hecho de que, en total, de marzo a agosto 2020, más 282.000 personas dejaron de contribuir con sus aportes.
Según Wated, una consolidación del cambio de tendencia solo se logrará si, hasta final de año, existe una efectiva reactivación productiva y una mejora sustancial en la economía del país.
Por eso, dentro de las proyecciones del IESS no se descarta el escenario de que hasta diciembre se registren alrededor de 500.000 desafiliaciones, con lo que la institución tendría $732 millones menos en ingresos.
“La mejora en agosto se debe al aumento de las afiliaciones voluntarias o sin relación de dependencia. Vamos a emprender una campaña masiva para convencer a más personas a que se afilien al sistema”, dijo Wated.
Desde el sector privado
Patricio Alarcón, presidente de la Cámara de Comercio de Quito (CCQ), alertó que el peso de las desafiliaciones está en el sector privado, donde se ha perdido 258.613 aportantes. En agosto, la caída fue de 10.709 afiliados, lo que es un impacto mensual menor que entre marzo y julio.
En otras palabras, el empleo formal continúa en decline, pero un porcentaje de los nuevos subempleados, y trabajadores por cuenta propia, han optado por aportar al sistema, aunque sea sobre el Salario Básico Unificado ($400), con el fin de no quedarse completamente desprotegidos.
La situación se agrava con el hecho de que, solo durante este año, el número de jubilados aumentó y los ingresos mensuales, hasta la fecha, han caído en más de $160 millones.
Problemas estructurales
Rodrigo Ibarra, presidente ejecutivo de Actuaria Consultores, aseveró que el fondo de pensiones no solamente tiene problemas de sostenibilidad, sino también de liquidez, debido a que el gasto anual en jubilaciones y beneficios funerales es de $4.500 millones; pero los ingresos solo llegan a $2.700 millones. El resto no está financiado y, además, el Estado no cumple con el aporte del 40% desde octubre 2019.
10.000 JUBILADOS han aumentado en lo que va del año. En total hay 533.000. El gasto en pensiones y otros beneficios se incrementó en:
$260 millones.Ese déficit se suma a los $7.139 millones correspondientes a la deuda acumulada del Estado con el IESS. De ese monto, de acuerdo con Wated, se ha logrado un preacuerdo con el Ministerio de Economía para que se abone, al menos $400 millones hasta fin de año con parte de los recursos que llegarán del Fondo Monetario Internacional. (JS)
Evolución de:
Desafiliaciones
Marzo: 18.297
Abril: 111.990
Mayo: 109.821
Junio: 30.530
Julio: 27.000
Afiliación
Agosto: 22.194