Alta cirugía

A propósito del último informe presentado por el Presidente de la República a la Asamblea Nacional, y la promesa de alta cirugía a la corrupción venga de donde venga, luego de tres años de ejercicio del poder, vemos que el bisturí utilizado por el Lcdo. Moreno ha sido mocho, sin filo alguno, porque los corruptos o están prófugos o son parte del mismo aparato estatal que nos gobierna, y por eso no se ha logrado descubrir y procesar a todos los que perjudicaron al país durante el período de bonanza que lo dirigió Correa.

El Fiscal viajó al Brasil para obtener la lista de los que fueron sobornados por Odebrecht y jamás la reveló, debió haber sido juzgado por cómplice y nada se ha hecho. En los actos de corrupción por la contratación pública, tampoco existe ningún sentenciado o procesado por peculado, no obstante que en la sentencia de Glas se ordenó a la Fiscalía la investigación de otros delitos afines.

La alta cirugía de Moreno hubiera funcionado si desde junio de 2017, hubiere incluido una reforma en el Código Integral Penal, con una disposición que faculte la acción pública contra los funcionarios que hayan exigido premios, porcentajes y valores que no significan “arreglo entre privados”.

Gustavo Chiriboga Castro