Sigue la crisis de los cadáveres en Guayaquil pese a esfuerzos de autoridades

Sigue la crisis de los cadáveres en Guayaquil pese a esfuerzos de autoridades.
Sigue la crisis de los cadáveres en Guayaquil pese a esfuerzos de autoridades.

Guayaquil/ EFE

La crisis por la suerte de los cadáveres en la ciudad ecuatoriana de Guayaquil continuaba este sábado pese a los esfuerzos de las autoridades por recolectarlos y en medio del desconsuelo e incertidumbre de los familiares.

Tras las impactantes imágenes en redes sociales de cadáveres en calles y domicilios de Guayaquil, colgadas por familiares desesperados ante la falta de respuesta de las autoridades para proceder a su levantamiento, el Gobierno y el Municipio han coordinado una respuesta en los últimos dos días que sin embargo, no ha logrado acabar con esta situación.

En la mañana de este sábado en el barrio norteño de Sauces 8, un cadáver fue dejado sobre un mueble en el parterre central de una avenida con el letrero «Hemos llamado al 911 y no hay ayuda».

Después del mediodía un equipo de agentes de Control Metropolitano de Guayaquil, que intervienen en las labores de levantamiento junto a una fuerza especial del Ejército, recogieron otro cuerpo en Sauces 5 y lo trasladaron al cementerio de Jardines de la Esperanza.

Se trataba de un fallecido hacía más de un día y que tampoco pudo ser recogido en su vivienda. Las autoridades fueron alertadas por los vecinos, que denunciaron que la madre de la víctima, una mujer mayor, permanecía en la casa junto al cadáver.

De acuerdo a un comunicado del Ayuntamiento, ese último cuerpo fue introducido en un féretro.

Varias decenas de personas se agolparon de mañana a las puertas del camposanto Parques de la Paz de Guayaquil, para exigir que les entregaran a sus difuntos familiares para poder enterrarlos.

«Hoy nos prometieron dar una lista oficial con todos los cadáveres que están allí, porque hay más de diez cuerpos irreconocidos que Medicina Legal va a proceder a reconocer por algún medio, por las huellas dactilares», manifestó a Efe, Jorge Díaz, quien esperaba tras la reja del acceso al cementerio para ver si el nombre de su padre figuraba en alguna de las listas.

Los cadáveres corresponden a personas que fenecieron en los hospitales o incluso en domicilios particulares, por COVID-19 u otras causas, que fueron levantados y recogidos por las autoridades esta semana.

«Hay una lista que ha emitido el hospital de Los Ceibos, pero no se si será oficial o algo aproximado, pero en esa lista no estaba el nombre de mi padre», aseguró Díaz sin ocultar su incertidumbre.

Junto a las rejas del camposanto, al que las autoridades traen los cadáveres recogidos, había una treintena de personas en las mismas circunstancias.

Se trata de un camposanto que hasta este domingo enterrará los cuerpos de aquellos que no tienen recursos para hacerlo de forma privada, y donde el registro se complica porque muchos llegan de hospitales en los que la presión estos días dificulta el trabajo.