El hecho de que la Justicia haya receptado 45.735 denuncias por maltrato a la mujer en lo que va de 2019 debe encender las alarmas no solo en temas de seguridad, convivencia social, desempeño profesional, de la familia como institución, de las iglesias y de la educación, sino también sobre nuestra idiosincrasia. No es suficiente que en el Código Orgánico Integral Penal se haya tipificado el femicidio.
El asunto se vuelve aún más pavoso: desde mediados del 2014 se han registrado hasta hoy 360 eventos de muertes violentas de mujeres. Según ‘La Hora’, el Consejo de la Judicatura informó que 191 casos se resolvieron por la vía judicial ordinaria, lo que corresponde al 25%; otros 147 tuvieron sentencia condenatoria de los agresores, mientras se declaró inocentes a siete procesados.
Desde luego que hay delitos contra la mujer “a la sombra” en el hogar, centros de trabajo y sitios públicos, que permanecen intocados. Todo apunta a que con respecto a la mujer en nuestra sociedad hay comportamientos, maneras características de pensar, sentir, actuar, rasgos y carácter propios o culturales, distintivos y peculiares que llevamos a cuestas a la manera de una cruz o un estigma.
Es muy plausible que el Gobierno dedique recursos a varios sectores de nuestra sociedad vulnerables, también debería incluirse a aquellas mujeres que corren peligro de femicidio. No bastan las boletas de alejamiento, se necesita una profilaxis social inmediata que involucre a las parejas en conflicto o insertadas en ambientes sociales, que promueva formas de comportamiento violento en la relación de pareja y familiar.
Todo cuanto hacemos debe tender al progreso y al perfeccionamiento”. Baruch Spinoza Filósofo neerlandés (1632-1677)Desconfío de la incomunicabilidad; es la fuente de toda violencia”. Jean Paul Sartre Filósofo y escritor francés (1905-1980)
El hecho de que la Justicia haya receptado 45.735 denuncias por maltrato a la mujer en lo que va de 2019 debe encender las alarmas no solo en temas de seguridad, convivencia social, desempeño profesional, de la familia como institución, de las iglesias y de la educación, sino también sobre nuestra idiosincrasia. No es suficiente que en el Código Orgánico Integral Penal se haya tipificado el femicidio.
El asunto se vuelve aún más pavoso: desde mediados del 2014 se han registrado hasta hoy 360 eventos de muertes violentas de mujeres. Según ‘La Hora’, el Consejo de la Judicatura informó que 191 casos se resolvieron por la vía judicial ordinaria, lo que corresponde al 25%; otros 147 tuvieron sentencia condenatoria de los agresores, mientras se declaró inocentes a siete procesados.
Desde luego que hay delitos contra la mujer “a la sombra” en el hogar, centros de trabajo y sitios públicos, que permanecen intocados. Todo apunta a que con respecto a la mujer en nuestra sociedad hay comportamientos, maneras características de pensar, sentir, actuar, rasgos y carácter propios o culturales, distintivos y peculiares que llevamos a cuestas a la manera de una cruz o un estigma.
Es muy plausible que el Gobierno dedique recursos a varios sectores de nuestra sociedad vulnerables, también debería incluirse a aquellas mujeres que corren peligro de femicidio. No bastan las boletas de alejamiento, se necesita una profilaxis social inmediata que involucre a las parejas en conflicto o insertadas en ambientes sociales, que promueva formas de comportamiento violento en la relación de pareja y familiar.
Todo cuanto hacemos debe tender al progreso y al perfeccionamiento”. Baruch Spinoza Filósofo neerlandés (1632-1677)Desconfío de la incomunicabilidad; es la fuente de toda violencia”. Jean Paul Sartre Filósofo y escritor francés (1905-1980)
El hecho de que la Justicia haya receptado 45.735 denuncias por maltrato a la mujer en lo que va de 2019 debe encender las alarmas no solo en temas de seguridad, convivencia social, desempeño profesional, de la familia como institución, de las iglesias y de la educación, sino también sobre nuestra idiosincrasia. No es suficiente que en el Código Orgánico Integral Penal se haya tipificado el femicidio.
El asunto se vuelve aún más pavoso: desde mediados del 2014 se han registrado hasta hoy 360 eventos de muertes violentas de mujeres. Según ‘La Hora’, el Consejo de la Judicatura informó que 191 casos se resolvieron por la vía judicial ordinaria, lo que corresponde al 25%; otros 147 tuvieron sentencia condenatoria de los agresores, mientras se declaró inocentes a siete procesados.
Desde luego que hay delitos contra la mujer “a la sombra” en el hogar, centros de trabajo y sitios públicos, que permanecen intocados. Todo apunta a que con respecto a la mujer en nuestra sociedad hay comportamientos, maneras características de pensar, sentir, actuar, rasgos y carácter propios o culturales, distintivos y peculiares que llevamos a cuestas a la manera de una cruz o un estigma.
Es muy plausible que el Gobierno dedique recursos a varios sectores de nuestra sociedad vulnerables, también debería incluirse a aquellas mujeres que corren peligro de femicidio. No bastan las boletas de alejamiento, se necesita una profilaxis social inmediata que involucre a las parejas en conflicto o insertadas en ambientes sociales, que promueva formas de comportamiento violento en la relación de pareja y familiar.
Todo cuanto hacemos debe tender al progreso y al perfeccionamiento”. Baruch Spinoza Filósofo neerlandés (1632-1677)Desconfío de la incomunicabilidad; es la fuente de toda violencia”. Jean Paul Sartre Filósofo y escritor francés (1905-1980)
El hecho de que la Justicia haya receptado 45.735 denuncias por maltrato a la mujer en lo que va de 2019 debe encender las alarmas no solo en temas de seguridad, convivencia social, desempeño profesional, de la familia como institución, de las iglesias y de la educación, sino también sobre nuestra idiosincrasia. No es suficiente que en el Código Orgánico Integral Penal se haya tipificado el femicidio.
El asunto se vuelve aún más pavoso: desde mediados del 2014 se han registrado hasta hoy 360 eventos de muertes violentas de mujeres. Según ‘La Hora’, el Consejo de la Judicatura informó que 191 casos se resolvieron por la vía judicial ordinaria, lo que corresponde al 25%; otros 147 tuvieron sentencia condenatoria de los agresores, mientras se declaró inocentes a siete procesados.
Desde luego que hay delitos contra la mujer “a la sombra” en el hogar, centros de trabajo y sitios públicos, que permanecen intocados. Todo apunta a que con respecto a la mujer en nuestra sociedad hay comportamientos, maneras características de pensar, sentir, actuar, rasgos y carácter propios o culturales, distintivos y peculiares que llevamos a cuestas a la manera de una cruz o un estigma.
Es muy plausible que el Gobierno dedique recursos a varios sectores de nuestra sociedad vulnerables, también debería incluirse a aquellas mujeres que corren peligro de femicidio. No bastan las boletas de alejamiento, se necesita una profilaxis social inmediata que involucre a las parejas en conflicto o insertadas en ambientes sociales, que promueva formas de comportamiento violento en la relación de pareja y familiar.
Todo cuanto hacemos debe tender al progreso y al perfeccionamiento”. Baruch Spinoza Filósofo neerlandés (1632-1677)Desconfío de la incomunicabilidad; es la fuente de toda violencia”. Jean Paul Sartre Filósofo y escritor francés (1905-1980)