Para las organizaciones criminales transnacionales dedicadas al narcotráfico, Ecuador ya no es solo un país de tránsito. Así lo asegura el exjefe de Inteligencia de las Fuerzas Armadas, Mario Pazmiño, quien afirma que el país sufrió un cambio de “estatus” y que ahora es un elemento sustancial dentro de la cadena de distribución de sustancias estupefacientes hacia mercados internacionales.
Un estudio publicado por la Fundación InSigth Crime, dedicada al estudio de fenómenos criminológicos en el Caribe y Latinoamérica, reveló que un tercio de la producción de cocaína en Colombia llega a territorio ecuatoriano para, a través de puertos marítimos y aéreos, se comercialice en Estados Unidos, Europa, Asia y Oceanía.
“Las autoridades siguen creyendo que somos un país de tránsito. Pensamos que el reconocer que estamos siendo penetrados por el narcotráfico es una debilidad”, dijo Pazmiño.
Decisiones políticas
El general de Policía (sp), Bolívar Pazmiño, director nacional Antinarcóticos en 2006, coincide con Pazmiño y considera que ahora Ecuador es visto por las mafias como un espacio de transporte, acopio y exportación de sustancias.
49,5
toneladas de droga se han incautado en lo que va de 2019. Para Pazmiño, este cambio de “estatus”, obedece a decisiones políticas tomadas durante el régimen de Rafael Correa, pues aseguró que la salida de la base de Manta obedeció a un acuerdo entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Gobierno anterior, a cambio de apoyo a una campaña política.
“La base de Manta era un estorbo para el sistema de narcotráfico. Tenía que salir del escenario para poder seguir traficando”, señaló Pazmiño.
El experto agregó que la dolarización y los niveles de corrupción en las cúpulas del Estado también influyeron para que Ecuador sea la ‘autopista’ de droga que abastece los mercados internacionales.
Cárteles
A criterio de Pazmiño, los cárteles de la droga ya operan en Ecuador. Aseguró que el corredor del Pacífico le corresponde a los grupos narcos de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación y del Golfo; y que, en el corredor Amazónico, están las organizaciones denominadas ‘Los Contadores’ y ‘La Constru’, que se disputan el control del negocio en los departamentos de Nariño y Putumayo, zona fronteriza con Ecuador.
De acuerdo con el informe de InSigth Crime, esos dos corredores son las rutas de salida de droga que tiene el país.
Incremento de sembríos
Daniel Pontón, del Centro de Seguridad y Defensa del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), basándose en datos del Observatorio de Drogas de Colombia, aseguró que el año pasado ese país alcanzó una cifra de 205.000 hectáreas de cultivos de hoja de coca, 23% más que la registrada en el año 2000.
El 44% de esos sembríos, dijo, se asentó en Putumayo y Nariño. Según ese mismo organismo, el potencial de producción de cocaína bordea entre las 1.200 y 1.500 toneladas métricas anuales aproximadamente.
“La concentración de cultivos hace que el lugar de salida natural de esa droga, por un tema geográfico, sean las costas nariñenses y ecuatorianas”, indicó.
Niveles de incautación
Según cifras de la Dirección Nacional de Antinarcóticos de la Policía Nacional, desde el primero de enero hasta ayer, se han incautado 49,5 toneladas de droga destinadas solamente al tráfico internacional, a diferencia de 2018 cuando, en el mismo período de tiempo se incautaron 65,5.
Pontón señaló que el nivel de incautación de droga frente a lo que logra salir llega a un 30 o 45% por el incremento de operativos que se efectúan para controlar estas actividades.
“La capacidad del Estado para controlar el narcotráfico ha ido progresando, eso implica mejoras en los niveles de incautación”, explicó.
Sin embargo, el experto aclaró que esto también representa un ascenso en los niveles de producción de droga, pues de esta forma, las organizaciones narcodelictivas buscan resarcir las pérdidas de la mercancía que no logra llegar a su destino. (FLC)
Productividad
Tráfico internacional
Toneladas incautadas Casos Detenidos
° 2018: 65,5 600 582
° 2019: 49,5 540 556
FUENTE: Dirección Nacional Antinarcóticos.
Para las organizaciones criminales transnacionales dedicadas al narcotráfico, Ecuador ya no es solo un país de tránsito. Así lo asegura el exjefe de Inteligencia de las Fuerzas Armadas, Mario Pazmiño, quien afirma que el país sufrió un cambio de “estatus” y que ahora es un elemento sustancial dentro de la cadena de distribución de sustancias estupefacientes hacia mercados internacionales.
Un estudio publicado por la Fundación InSigth Crime, dedicada al estudio de fenómenos criminológicos en el Caribe y Latinoamérica, reveló que un tercio de la producción de cocaína en Colombia llega a territorio ecuatoriano para, a través de puertos marítimos y aéreos, se comercialice en Estados Unidos, Europa, Asia y Oceanía.
“Las autoridades siguen creyendo que somos un país de tránsito. Pensamos que el reconocer que estamos siendo penetrados por el narcotráfico es una debilidad”, dijo Pazmiño.
Decisiones políticas
El general de Policía (sp), Bolívar Pazmiño, director nacional Antinarcóticos en 2006, coincide con Pazmiño y considera que ahora Ecuador es visto por las mafias como un espacio de transporte, acopio y exportación de sustancias.
49,5
toneladas de droga se han incautado en lo que va de 2019. Para Pazmiño, este cambio de “estatus”, obedece a decisiones políticas tomadas durante el régimen de Rafael Correa, pues aseguró que la salida de la base de Manta obedeció a un acuerdo entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Gobierno anterior, a cambio de apoyo a una campaña política.
“La base de Manta era un estorbo para el sistema de narcotráfico. Tenía que salir del escenario para poder seguir traficando”, señaló Pazmiño.
El experto agregó que la dolarización y los niveles de corrupción en las cúpulas del Estado también influyeron para que Ecuador sea la ‘autopista’ de droga que abastece los mercados internacionales.
Cárteles
A criterio de Pazmiño, los cárteles de la droga ya operan en Ecuador. Aseguró que el corredor del Pacífico le corresponde a los grupos narcos de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación y del Golfo; y que, en el corredor Amazónico, están las organizaciones denominadas ‘Los Contadores’ y ‘La Constru’, que se disputan el control del negocio en los departamentos de Nariño y Putumayo, zona fronteriza con Ecuador.
De acuerdo con el informe de InSigth Crime, esos dos corredores son las rutas de salida de droga que tiene el país.
Incremento de sembríos
Daniel Pontón, del Centro de Seguridad y Defensa del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), basándose en datos del Observatorio de Drogas de Colombia, aseguró que el año pasado ese país alcanzó una cifra de 205.000 hectáreas de cultivos de hoja de coca, 23% más que la registrada en el año 2000.
El 44% de esos sembríos, dijo, se asentó en Putumayo y Nariño. Según ese mismo organismo, el potencial de producción de cocaína bordea entre las 1.200 y 1.500 toneladas métricas anuales aproximadamente.
“La concentración de cultivos hace que el lugar de salida natural de esa droga, por un tema geográfico, sean las costas nariñenses y ecuatorianas”, indicó.
Niveles de incautación
Según cifras de la Dirección Nacional de Antinarcóticos de la Policía Nacional, desde el primero de enero hasta ayer, se han incautado 49,5 toneladas de droga destinadas solamente al tráfico internacional, a diferencia de 2018 cuando, en el mismo período de tiempo se incautaron 65,5.
Pontón señaló que el nivel de incautación de droga frente a lo que logra salir llega a un 30 o 45% por el incremento de operativos que se efectúan para controlar estas actividades.
“La capacidad del Estado para controlar el narcotráfico ha ido progresando, eso implica mejoras en los niveles de incautación”, explicó.
Sin embargo, el experto aclaró que esto también representa un ascenso en los niveles de producción de droga, pues de esta forma, las organizaciones narcodelictivas buscan resarcir las pérdidas de la mercancía que no logra llegar a su destino. (FLC)
Productividad
Tráfico internacional
Toneladas incautadas Casos Detenidos
° 2018: 65,5 600 582
° 2019: 49,5 540 556
FUENTE: Dirección Nacional Antinarcóticos.
Para las organizaciones criminales transnacionales dedicadas al narcotráfico, Ecuador ya no es solo un país de tránsito. Así lo asegura el exjefe de Inteligencia de las Fuerzas Armadas, Mario Pazmiño, quien afirma que el país sufrió un cambio de “estatus” y que ahora es un elemento sustancial dentro de la cadena de distribución de sustancias estupefacientes hacia mercados internacionales.
Un estudio publicado por la Fundación InSigth Crime, dedicada al estudio de fenómenos criminológicos en el Caribe y Latinoamérica, reveló que un tercio de la producción de cocaína en Colombia llega a territorio ecuatoriano para, a través de puertos marítimos y aéreos, se comercialice en Estados Unidos, Europa, Asia y Oceanía.
“Las autoridades siguen creyendo que somos un país de tránsito. Pensamos que el reconocer que estamos siendo penetrados por el narcotráfico es una debilidad”, dijo Pazmiño.
Decisiones políticas
El general de Policía (sp), Bolívar Pazmiño, director nacional Antinarcóticos en 2006, coincide con Pazmiño y considera que ahora Ecuador es visto por las mafias como un espacio de transporte, acopio y exportación de sustancias.
49,5
toneladas de droga se han incautado en lo que va de 2019. Para Pazmiño, este cambio de “estatus”, obedece a decisiones políticas tomadas durante el régimen de Rafael Correa, pues aseguró que la salida de la base de Manta obedeció a un acuerdo entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Gobierno anterior, a cambio de apoyo a una campaña política.
“La base de Manta era un estorbo para el sistema de narcotráfico. Tenía que salir del escenario para poder seguir traficando”, señaló Pazmiño.
El experto agregó que la dolarización y los niveles de corrupción en las cúpulas del Estado también influyeron para que Ecuador sea la ‘autopista’ de droga que abastece los mercados internacionales.
Cárteles
A criterio de Pazmiño, los cárteles de la droga ya operan en Ecuador. Aseguró que el corredor del Pacífico le corresponde a los grupos narcos de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación y del Golfo; y que, en el corredor Amazónico, están las organizaciones denominadas ‘Los Contadores’ y ‘La Constru’, que se disputan el control del negocio en los departamentos de Nariño y Putumayo, zona fronteriza con Ecuador.
De acuerdo con el informe de InSigth Crime, esos dos corredores son las rutas de salida de droga que tiene el país.
Incremento de sembríos
Daniel Pontón, del Centro de Seguridad y Defensa del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), basándose en datos del Observatorio de Drogas de Colombia, aseguró que el año pasado ese país alcanzó una cifra de 205.000 hectáreas de cultivos de hoja de coca, 23% más que la registrada en el año 2000.
El 44% de esos sembríos, dijo, se asentó en Putumayo y Nariño. Según ese mismo organismo, el potencial de producción de cocaína bordea entre las 1.200 y 1.500 toneladas métricas anuales aproximadamente.
“La concentración de cultivos hace que el lugar de salida natural de esa droga, por un tema geográfico, sean las costas nariñenses y ecuatorianas”, indicó.
Niveles de incautación
Según cifras de la Dirección Nacional de Antinarcóticos de la Policía Nacional, desde el primero de enero hasta ayer, se han incautado 49,5 toneladas de droga destinadas solamente al tráfico internacional, a diferencia de 2018 cuando, en el mismo período de tiempo se incautaron 65,5.
Pontón señaló que el nivel de incautación de droga frente a lo que logra salir llega a un 30 o 45% por el incremento de operativos que se efectúan para controlar estas actividades.
“La capacidad del Estado para controlar el narcotráfico ha ido progresando, eso implica mejoras en los niveles de incautación”, explicó.
Sin embargo, el experto aclaró que esto también representa un ascenso en los niveles de producción de droga, pues de esta forma, las organizaciones narcodelictivas buscan resarcir las pérdidas de la mercancía que no logra llegar a su destino. (FLC)
Productividad
Tráfico internacional
Toneladas incautadas Casos Detenidos
° 2018: 65,5 600 582
° 2019: 49,5 540 556
FUENTE: Dirección Nacional Antinarcóticos.
Para las organizaciones criminales transnacionales dedicadas al narcotráfico, Ecuador ya no es solo un país de tránsito. Así lo asegura el exjefe de Inteligencia de las Fuerzas Armadas, Mario Pazmiño, quien afirma que el país sufrió un cambio de “estatus” y que ahora es un elemento sustancial dentro de la cadena de distribución de sustancias estupefacientes hacia mercados internacionales.
Un estudio publicado por la Fundación InSigth Crime, dedicada al estudio de fenómenos criminológicos en el Caribe y Latinoamérica, reveló que un tercio de la producción de cocaína en Colombia llega a territorio ecuatoriano para, a través de puertos marítimos y aéreos, se comercialice en Estados Unidos, Europa, Asia y Oceanía.
“Las autoridades siguen creyendo que somos un país de tránsito. Pensamos que el reconocer que estamos siendo penetrados por el narcotráfico es una debilidad”, dijo Pazmiño.
Decisiones políticas
El general de Policía (sp), Bolívar Pazmiño, director nacional Antinarcóticos en 2006, coincide con Pazmiño y considera que ahora Ecuador es visto por las mafias como un espacio de transporte, acopio y exportación de sustancias.
49,5
toneladas de droga se han incautado en lo que va de 2019. Para Pazmiño, este cambio de “estatus”, obedece a decisiones políticas tomadas durante el régimen de Rafael Correa, pues aseguró que la salida de la base de Manta obedeció a un acuerdo entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Gobierno anterior, a cambio de apoyo a una campaña política.
“La base de Manta era un estorbo para el sistema de narcotráfico. Tenía que salir del escenario para poder seguir traficando”, señaló Pazmiño.
El experto agregó que la dolarización y los niveles de corrupción en las cúpulas del Estado también influyeron para que Ecuador sea la ‘autopista’ de droga que abastece los mercados internacionales.
Cárteles
A criterio de Pazmiño, los cárteles de la droga ya operan en Ecuador. Aseguró que el corredor del Pacífico le corresponde a los grupos narcos de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación y del Golfo; y que, en el corredor Amazónico, están las organizaciones denominadas ‘Los Contadores’ y ‘La Constru’, que se disputan el control del negocio en los departamentos de Nariño y Putumayo, zona fronteriza con Ecuador.
De acuerdo con el informe de InSigth Crime, esos dos corredores son las rutas de salida de droga que tiene el país.
Incremento de sembríos
Daniel Pontón, del Centro de Seguridad y Defensa del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), basándose en datos del Observatorio de Drogas de Colombia, aseguró que el año pasado ese país alcanzó una cifra de 205.000 hectáreas de cultivos de hoja de coca, 23% más que la registrada en el año 2000.
El 44% de esos sembríos, dijo, se asentó en Putumayo y Nariño. Según ese mismo organismo, el potencial de producción de cocaína bordea entre las 1.200 y 1.500 toneladas métricas anuales aproximadamente.
“La concentración de cultivos hace que el lugar de salida natural de esa droga, por un tema geográfico, sean las costas nariñenses y ecuatorianas”, indicó.
Niveles de incautación
Según cifras de la Dirección Nacional de Antinarcóticos de la Policía Nacional, desde el primero de enero hasta ayer, se han incautado 49,5 toneladas de droga destinadas solamente al tráfico internacional, a diferencia de 2018 cuando, en el mismo período de tiempo se incautaron 65,5.
Pontón señaló que el nivel de incautación de droga frente a lo que logra salir llega a un 30 o 45% por el incremento de operativos que se efectúan para controlar estas actividades.
“La capacidad del Estado para controlar el narcotráfico ha ido progresando, eso implica mejoras en los niveles de incautación”, explicó.
Sin embargo, el experto aclaró que esto también representa un ascenso en los niveles de producción de droga, pues de esta forma, las organizaciones narcodelictivas buscan resarcir las pérdidas de la mercancía que no logra llegar a su destino. (FLC)
Productividad
Tráfico internacional
Toneladas incautadas Casos Detenidos
° 2018: 65,5 600 582
° 2019: 49,5 540 556
FUENTE: Dirección Nacional Antinarcóticos.