Estado y nacionalidades

Gustavo Ortiz Hidalgo

La Constitución de 1998 expresaba el carácter “pluricultural y multiétnico” del Estado. También reconocía a los pueblos indígenas que se autodefinían como nacionalidades y les garantizaba varios derechos colectivos. En esta perspectiva, establecía que las autoridades de los pueblos indígenas ejercerán funciones de justicia, aplicando normas y procedimientos propios para la solución de conflictos internos de conformidad con sus costumbres.

Lo que pudo parecer simple novelería, o justa reivindicación de un importante sector de la población ecuatoriana, adquirió una dimensión diferente en la Constitución de 2008, actualmente en vigencia, que parte con la celebración a la “Pachamama”, caracterizando al Estado como “intercultural y plurinacional” y reconociendo al kichwa y al shuar como idiomas oficiales de relación intercultural.

Varios artículos de la Constitución vigente van configurando el Estado Plurinacional, que es el concepto esencial de una línea argumentativa que tiene su origen en la Constitución de 1998. En este sentido, se amplían los derechos de las comunidades, pueblos y nacionalidades; se establece una sección propia dedicada a la justicia indígena; y se otorga el carácter de regímenes especiales a las circunscripciones territoriales indígenas y pluriculturales, con la posibilidad de ejercer las competencias de los gobiernos autónomos descentralizados.

Los ideólogos del Estado Plurinacional plantean subvertir el orden capitalista, desmontar el actual Estado Nacional e instaurar una sociedad inspirada en las tradiciones de las diversas nacionalidades, reconociéndoles soberanía, autodeterminación, territorio y sus propios sistemas de justicia y representación política ¿Será por esta vía que el Ecuador debe caminar para solucionar sus problemas de pobreza, inequidad, racismo y discrimen? (O)

Gustavo Ortiz Hidalgo

La Constitución de 1998 expresaba el carácter “pluricultural y multiétnico” del Estado. También reconocía a los pueblos indígenas que se autodefinían como nacionalidades y les garantizaba varios derechos colectivos. En esta perspectiva, establecía que las autoridades de los pueblos indígenas ejercerán funciones de justicia, aplicando normas y procedimientos propios para la solución de conflictos internos de conformidad con sus costumbres.

Lo que pudo parecer simple novelería, o justa reivindicación de un importante sector de la población ecuatoriana, adquirió una dimensión diferente en la Constitución de 2008, actualmente en vigencia, que parte con la celebración a la “Pachamama”, caracterizando al Estado como “intercultural y plurinacional” y reconociendo al kichwa y al shuar como idiomas oficiales de relación intercultural.

Varios artículos de la Constitución vigente van configurando el Estado Plurinacional, que es el concepto esencial de una línea argumentativa que tiene su origen en la Constitución de 1998. En este sentido, se amplían los derechos de las comunidades, pueblos y nacionalidades; se establece una sección propia dedicada a la justicia indígena; y se otorga el carácter de regímenes especiales a las circunscripciones territoriales indígenas y pluriculturales, con la posibilidad de ejercer las competencias de los gobiernos autónomos descentralizados.

Los ideólogos del Estado Plurinacional plantean subvertir el orden capitalista, desmontar el actual Estado Nacional e instaurar una sociedad inspirada en las tradiciones de las diversas nacionalidades, reconociéndoles soberanía, autodeterminación, territorio y sus propios sistemas de justicia y representación política ¿Será por esta vía que el Ecuador debe caminar para solucionar sus problemas de pobreza, inequidad, racismo y discrimen? (O)

Gustavo Ortiz Hidalgo

La Constitución de 1998 expresaba el carácter “pluricultural y multiétnico” del Estado. También reconocía a los pueblos indígenas que se autodefinían como nacionalidades y les garantizaba varios derechos colectivos. En esta perspectiva, establecía que las autoridades de los pueblos indígenas ejercerán funciones de justicia, aplicando normas y procedimientos propios para la solución de conflictos internos de conformidad con sus costumbres.

Lo que pudo parecer simple novelería, o justa reivindicación de un importante sector de la población ecuatoriana, adquirió una dimensión diferente en la Constitución de 2008, actualmente en vigencia, que parte con la celebración a la “Pachamama”, caracterizando al Estado como “intercultural y plurinacional” y reconociendo al kichwa y al shuar como idiomas oficiales de relación intercultural.

Varios artículos de la Constitución vigente van configurando el Estado Plurinacional, que es el concepto esencial de una línea argumentativa que tiene su origen en la Constitución de 1998. En este sentido, se amplían los derechos de las comunidades, pueblos y nacionalidades; se establece una sección propia dedicada a la justicia indígena; y se otorga el carácter de regímenes especiales a las circunscripciones territoriales indígenas y pluriculturales, con la posibilidad de ejercer las competencias de los gobiernos autónomos descentralizados.

Los ideólogos del Estado Plurinacional plantean subvertir el orden capitalista, desmontar el actual Estado Nacional e instaurar una sociedad inspirada en las tradiciones de las diversas nacionalidades, reconociéndoles soberanía, autodeterminación, territorio y sus propios sistemas de justicia y representación política ¿Será por esta vía que el Ecuador debe caminar para solucionar sus problemas de pobreza, inequidad, racismo y discrimen? (O)

Gustavo Ortiz Hidalgo

La Constitución de 1998 expresaba el carácter “pluricultural y multiétnico” del Estado. También reconocía a los pueblos indígenas que se autodefinían como nacionalidades y les garantizaba varios derechos colectivos. En esta perspectiva, establecía que las autoridades de los pueblos indígenas ejercerán funciones de justicia, aplicando normas y procedimientos propios para la solución de conflictos internos de conformidad con sus costumbres.

Lo que pudo parecer simple novelería, o justa reivindicación de un importante sector de la población ecuatoriana, adquirió una dimensión diferente en la Constitución de 2008, actualmente en vigencia, que parte con la celebración a la “Pachamama”, caracterizando al Estado como “intercultural y plurinacional” y reconociendo al kichwa y al shuar como idiomas oficiales de relación intercultural.

Varios artículos de la Constitución vigente van configurando el Estado Plurinacional, que es el concepto esencial de una línea argumentativa que tiene su origen en la Constitución de 1998. En este sentido, se amplían los derechos de las comunidades, pueblos y nacionalidades; se establece una sección propia dedicada a la justicia indígena; y se otorga el carácter de regímenes especiales a las circunscripciones territoriales indígenas y pluriculturales, con la posibilidad de ejercer las competencias de los gobiernos autónomos descentralizados.

Los ideólogos del Estado Plurinacional plantean subvertir el orden capitalista, desmontar el actual Estado Nacional e instaurar una sociedad inspirada en las tradiciones de las diversas nacionalidades, reconociéndoles soberanía, autodeterminación, territorio y sus propios sistemas de justicia y representación política ¿Será por esta vía que el Ecuador debe caminar para solucionar sus problemas de pobreza, inequidad, racismo y discrimen? (O)