Quinto Poder

Rodrigo Contero Peñafiel

El Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, pura novelería del correísmo; fue creado como poder del Estado, para dentro de las doce atribuciones contempladas en el Art. 208 de la Constitución de la República, supuestamente promover la participación ciudadana, investigar denuncias de corrupción y designar a las autoridades de la Procuraduría, Contraloría y Fiscalía General del Estado, de la Superintendencias, de las Defensorías del Pueblo y Pública, miembros del Consejo Nacional Electoral, del Tribunal Contencioso Electoral y Consejo de la Judicatura.

El funcionamiento del denominado Quinto Poder, para la mayoría de la ciudadanía es un fracaso; grandes voces de ilustres personajes como el Dr. Julio César Trujillo pidieron su desaparición. El pueblo no puede sufragar gastos de una burocracia inepta e inútil en un país con la economía paralizada y crecimiento cero.

De sus atribuciones, las dos primeras han sido nulas puesto que en la década pasada se cometieron una serie de delitos contra la administración pública, con el afán insoslayable de ocultar información; en tanto, la tercera, sobre la designación de altas autoridades estatales, anteriormente en manos de la Función Legislativa, ha sido un engaño para la ciudadanía y para quienes concursaban.

Por detrás de los sistemas informáticos, todo estaba “amarrado”, con la participación del entorno del Presidente de la República; a quienes no lo merecían se les asignaba las mejores notas para su designación y de esta manera tenían controlada cualquier denuncia de corrupción. Las últimas investigaciones penales a cargo de la Fiscalía General así lo confirman.

La elección del Presidente del Consejo, recaída en un ciudadano que “viste de religioso” y que nunca debió ser inscrito por el Consejo Nacional Electoral, al hacerlo inobservó la Ley, generando que su elección y posesión sean nulas.

Ese mismo Presidente que se burló de la Asamblea Nacional, al negarse a responder preguntas de los asambleístas y retirarse “bendiciéndolos”. El juicio político a cuatro miembros del Quinto Poder es legal y oportuno; la mayoría de los ciudadanos esperamos su pronta desaparición.

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