Discernir en democracia

Lucía Margarita Figueroa Robles

El discernir es aquella capacidad que tiene el ser humano para distinguir, separar o crear un juicio de valor, previa una reflexión exhaustiva. Así mismo es la aptitud unida al juicio moral que nos da la capacidad de meditar si una acción es adecuada o inadecuada, correcta o incorrecta, buena o mala. Y es que hay momentos en la vida, en los que no sabemos el rumbo que deberíamos tomar, pero es en esos precisos instantes, donde requerimos mucha sabiduría, sensatez y sobre todo discernimiento para no equivocarnos, tomando conciencia de lo que queremos alcanzar, lo que nos conviene, frente a lo que quizá nos agrada, pero no nos conviene. De ahí que las raíces actuales de los principales inconvenientes observados en la democracia son “espirituales” por decirlo de algún modo, frente a una escasa cultura del discernimiento, sobre todo si consideramos el populismo que ha ganado muchos adeptos en el mundo, en donde un gran conglomerado se deja seducir por discursos en donde se hablan de fórmulas sencillas para solucionar problemas complejos, entregándose a aquellas estrategias de agitación que se aprovechan de cualquier desorden para levantarse como paliativo del caos. Frente a ello está nuestra responsabilidad ciudadana, una lucha por no permitir que se sepulten nuestras ideologías, de ahí que para lograr una verdadera democracia, requerimos de una sociedad que tenga un discernimiento público de calidad.

Es evidente que la democracia ha recibido un sinnúmero de interpretaciones según los momentos transcurridos en la historia de las naciones, logrando insertarse en diversos sectores, es así como aquellas acepciones infundadas por los griegos y romanos en un inicio, no atañen íntegramente a las actuales sociedades, pese a que sus ideas siguen influenciando el pensamiento político posmoderno. La democracia no nos restringe el deber que tenemos de ejercitar nuestra facultad de discernimiento, lo cual nos ayudará a separar “el bien del mal” para alcanzar mejores senderos (O)