POR: LAURA BENÍTEZ CISNEROS
Un diciembre de 1808, un selecto grupo de caballeros quiteños y otros reunidos en la hacienda de los Chillos que tenía Juan Pío Montúfar resolvieron conspirar y establecer una Junta de Gobierno parecida a la de los españoles. En esas fechas el rey Fernando VII estaba preso y Napoleón Bonaparte había invadido España, es en ese entonces que es necesario defender los derechos de la corona de la Madre Patria y de la Religión Católica.
Lamentable muchos de los comprometidos en la rebelión cayeron prisioneros, meses después varios patriotas volvieron a reunirse, la noche del 9 de Agosto de 1809, en la casa de la patriota Doña Manuela Cañizares, en donde en la actualidad es la casa parroquial del “Sagrario” situada a pocos metros del Palacio Real de la Audiencia de Quito de ese entonces hoy Palacio Nacional de Gobierno.
Hablar de la Mujer es un orgullo que nos debe engrandecer a todas, como esta heroína quiteña que brindó todas las facilidades, para que se organice la primera Junta Suprema. Está Junta quedo conformada Presidente Don Juan Pío Montúfar, Márquez de Selva Alegre; Vicepresidente Obispo Cuero y Caicedo; Secretario de Gracia y Justicia Dr. Manuel Quiroga; Secretario del Interior Dr. Juan de Dios Morales; Secretario de Hacienda Don Juan Larrea y Secretario General Dr. Antonio Ante.
Al amanecer el 10 de Agosto de 1809, el Dr. Ante Secretario General llevó el oficio al señor Manuel Urriez, Conde Ruiz de Castilla Presidente de la Real Audiencia de Quito. El guardia de turno impidió al Dr. Ante que no entre al Palacio por cuanto era muy temprano, para despertar al Presidente. Pero acepto pasar el oficio entre otras cosas, se le comunicaba que por voluntad de Junta Soberana, el Conde dejaba desde ese momento de ser el Presidente de la Real Audiencia de Quito, además los miembros del antiguo Gobierno cesaban en sus funciones.