Izquierdas

Richard Salazar Medina

La discusión ideológica ha quedado en desuso. Pero, si queremos construir una verdadera democracia, es imprescindible contar con partidos políticos con perspectiva ideológica. La moda de poner nombres con sonidos positivos, como Avanza, Podemos, Cambiemos, Alianza, no tienen más que un trasfondo de mercadeo y no dicen nada. De allí, que hemos visto personajes y partidos que se autodefinen de izquierda, pero gobiernan cual si fueran derecha radical.

Es eso lo que hemos vivido en los últimos 12 años. Gobierna un partido que se dice de izquierda, con un agresivo discurso de cambio. Cambio que, sin embargo, no se ha visto. Durante los períodos del innombrable gobernante anterior, se habló mucho de equidad.

Basta salir a la calle o viajar por las provincias y darse cuenta que el país sigue siendo el mismo, con mucha gente pobre y sin oportunidades; que la salud pública es de difícil acceso y en muchos casos de muy mala calidad. Y no solo eso, en estos días, en que tuvimos una ministra cínica, se ha visto hospitales que no tienen más que paracetamol y medicinas caducadas, mientras la gente, muchos con cáncer, padecen o mueren.

Vemos que la educación, con ministros de lo más variopinto en lo ideológico, tiene graves problemas y que el nuevo alcalde de Quito piensa mejorarla unificando los uniformes. Habría que debatir si es necesario que existan uniformes. Ni hablar del sector rural. La concentración de la tierra hoy es prácticamente la misma que existía antes de las reformas agrarias, en la década de 1950. No falta quien dice “pero tenemos carreteras”. Las carreteras solo fueron ampliadas y a más kilómetros construidos, más porcentaje de coimas, regla de 3 simple.

Los gobiernos de AP no han sido de izquierda. Han sido gobiernos demagógicos, con discurso para las masas, usando símbolos de la izquierda tradicional. Las izquierdas, por ello, tienen en este momento la necesidad de reinventarse y ser pragmáticas. Es urgente construir un mundo mejor y más equitativo, pero el discurso de la izquierda del siglo XX también debe ser actualizarse a nuestros tiempos.

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