Redacción TUNGURAHUA
Más de 50 variedades de plantas medicinales y flores se utilizan en el mercado Modelo de Ambato para curar el espanto, alejar las malas vibras o para atraer la buena suerte.
Esta actividad, que se realiza todos los días en el último piso de este lugar de acopio, aumenta drásticamente los últimos meses del año, pues es el tiempo en el que buscan renovar sus energías.
El costo de las ‘limpias’ es de tres dólares para niños y de cinco para adultos. Dependiendo del procedimiento, son necesarias hasta tres visitas al mercado.
El proceso se complementa con jabones, esencias, inciensos y otros artículos naturales que también están a disposición del público en las vitrinas de las 34 mujeres que se dedican a esta labor. Ellas también aconsejan a sus clientes sobre la preparación de bebidas a base de las plantas, cada una con propiedades curativas particulares.
Las que más se utilizan son la manzanilla, la hierba luisa, la ortiga, el marco, el eucalipto, el romero, la menta, la hierbabuena, la salvia, el sauco y el matico.
Detalles
Las ‘limpias’ y los baños se llevan a cabo en unas pequeñas habitaciones, cada una puede durar entre 10 y 15 minutos.
“Un niño que está con ‘mal aire’ se pone llorón, le da vómito y quiere estar solo en brazos de la madre. Son más o menos los mismos síntomas cuando se está ‘ojeado’ o con ‘espanto’, a ellos se les frota un huevo desde la cabeza hasta los pies”, menciona la curandera María Yaguar.
Agrega que luego el huevo se rompe y se lo pone en un vaso con agua. Allí se puede ver si la persona está con ‘mal de ojo’, asustado o no. Si el huevo se hace en forma de vela es porque estaba enfermo, y la cantidad de velas es la medida del mal.
Para otro tipo de limpias se usa licor, colonias y esencias, los cuales son rociados al paciente desde la boca de la curandera, como complemento a la ‘limpia’ que busca combatir el ‘mal aire’, el ‘espanto’ y las energías negativas que albergan en el interior de la gente.
Mayra Tubón, quien también se dedica a realizar esta práctica durante varios años, afirmó que se necesita tener el carácter fuerte para hacer ‘limpias’, pues las malas energías pueden llegar a quien las realiza.
Clientes
Laura Carranza es una de las personas que acude al mercado Modelo a realizarse ‘limpias’. Decidió ser parte de esta práctica desde muy niña por influencia de su madre.
“Cada tres o cuatro meses vengo a hacerme una ‘limpia’ para la suerte y para quitarme las malas energías, el cuerpo se siente más liviano después de salir de aquí”, cuenta.
Para varios de los creyentes de estos métodos es infaltable este ritual cada fin de año, como el caso de Roberto Muñoz, quien asegura que lleva cinco años seguidos acudiendo al mercado Modelo. “Yo confío en mis caseras porque me ha ido bien todos los años, por eso nunca falto”, añadió y aseguró que es muy importante la fe en quienes se someten a esta práctica. (RMC)
Variedad
° En la antigüedad, varias de las personas que sometían las ‘limpias’ optaban por recolectar las plantas del monte, de las orillas de los ríos y las quebradas. Es el caso de María Yaguar, quien se dedica a hacer ‘limpias’ en el mercado Modelo desde que tenía 16 años. “Antes salíamos a recolectar las plantas, la mayoría crecían solas, y con el tiempo aprendíamos a diferenciarlas y a saber la utilidad de cada una”, aseguró.
María tiene 58 años y actualmente ha dejado esta práctica de lado por la falta de tiempo y porque en el mercado Mayorista de Ambato ya se pueden encontrar todas las hierbas medicinales que necesita para su trabajo. Esta mujer, oriunda de Salasaca, explica que las hierbas se diferencian en amargas y dulces. Las primeras sirven para anular las energías negativas, se usan para las purificaciones. Mientras que las segundas son aquellas que ayudan a mejorar la suerte, atraer la fortuna y obtener prosperidad.