La Programación Neurolinguística

Lucía Margarita Figueroa Robles

El maravilloso mundo de la educación conlleva una serie de procesos y experiencias, que cumplen una función importante para alcanzar la calidad. Si bien es cierto, aunque los docentes puedan tener las mejores intenciones para contribuir con la formación de los educandos, siendo los guías que promuevan una construcción del conocimiento para que este llegue a convertirse en un aprendizaje significativo; dentro de esta realidad, también hemos sido testigos, sobre todo haciendo referencia a una educación tradicional, – que no está por demás decirlo, aún existe-; en donde observamos que el estudiante llega al final de su vida profesional sintiéndose como un producto terminado, hasta el día en el que inicia su vida laboral, y se da cuenta, que de lo aprendido, únicamente el 20% le es útil, mientras el 80% no, situación que obviamente provocará una desmotivación, o baja en su estado anímico, generando que el joven se considere un ser incompetente o casi un analfabeto. Y es que con el transcurrir del tiempo, si las personas no se autoeducan o autopreparan, con el nivel de competitividad que existe hoy por hoy, fácilmente podrían tomar ventaja en la empresa. Es ahí cuando surge un término muy sugestivo que es la Programación Neurolinguistica (PNL), lo cual en definitiva es un modelo para la comprensión y éxito de la comunicación humana, que busca traducirse en la satisfacción personal, aprendizajes, experiencias, etc.

La PNL deriva del estudio de conductas de “calidad”, hábitos que conducen a la eficacia y resultados sobresalientes; Desde el punto de vista pedagógico, la PNL programa hábitos, pensamientos y sensaciones correctas, se sitúa como herramienta o medio que busca apoyar la finalidad de educar para la vida, permitiendo mejorar los procesos mentales mediante el uso y asociación adecuada del lenguaje. (O)