La corrupción sigue campante en el país

POR: LAURA BENÍTEZ CISNEROS

A medida que va pasando el tiempo, siguen saliendo los casos de corrupción en nuestro país de funcionarios del régimen correísta que se encuentran implicados en varios casos y delitos que han cometido en contra del pueblo, la sociedad, la economía y el Estado. Según estudios realizados una encuestadora extranjera al país lo ponen con tendencia de justificación a los actos de corrupción y soborno cometidos por estos malos funcionarios, mal llamados padres de la Patria.

Nuestro país de ha vuelto una nación permisiva que desde décadas pasadas ha consentido y permitido a muchos empleados de gobiernos pasados de guante blanco a que nos atraquen y se lleven las riquezas del pueblo ecuatoriano. Toda esta corrupción existente, no es más que el resultado de una sociedad y un país sumiso y manejable ante cualquier autoridad o mandatario de turno que se presente, con cierta visión al futuro de barrigas contentas, con una justicia decadente de principios y valores que ha provocado un círculo vicioso en donde impera la corrupción y la gente se ha vuelto despreocupada, indolente, resignada, sin entender cuál es el verdadero patriotismo civismo y moral que debe poseer una persona de bien.

Un líder para que se postule a desempeñar cualquier cargo o función pública, debemos escogerlo significativamente y que nuestros mandantes sean de confianza con propósitos reales y firmes sin caer en la componenda ni recibir coimas de nadie.

Tenemos que tener presente que siempre nos hablen con la verdad, porque a mediano o largo plazo los afectados somos los ciudadanos ecuatorianos que hemos confiado en su palabra. Debemos seguir apoyando a la Comisión Anti Corrupción, para que su lucha sea en favor del pueblo, con autoridades de manos limpias, con una justicia real, que no opaquen la imagen del poder judicial, ni sus acciones y que siempre vayan en beneficio de la comunidad nacional.