Educare

Richard E. Ruiz O.

La palabra educar proviene del latín educare que significa: guiar, conducir. El acto de educar supone creatividad, pero en muchas ocasiones estamos acostumbrándonos a la norma de seguir el libro de estudio, como si ese fuera el fin y no un medio para aprender y dejamos a un lado otras iniciativas, que podrían generar incluso mejores resultados de aprendizaje, proyectos de aprendizaje innovadores, interesantes y útiles. Pero algunos docentes dicen hay que seguir el libro y lo que es peor algunos padres de familia, les interesa sólo el desarrollo del contenido ¿Cómo innovar el hecho educativo?

Es necesario estimular proyectos educativos novedosos, tales como el aprendizaje por proyectos, estudio de casos… Hay que contar más con la opinión de los profesores, padres de familia y estudiantes e incentivar los proyectos que nos plantean y construir a partir de las necesidades de alguien que está diariamente con los niños. A veces se hacen proyectos desde Planificación Educativa. Investigación Educativa, por parte de personal que nunca en su vida han sido educadores. Hay que reunir a los actores educativos para recrear con ellos al proceso de inter aprendizaje, para que diseñen sus propias estrategias de aprendizaje. Falta decisión. Muchas buenas prácticas se podrían desarrollar.

El libro de texto es una herramienta clave, pero durante años ha sido la única. Podemos utilizarlo, pero no es la guía a seguir en exclusiva. Hay proyectos maravillosos con los que se pueden realizar con los niños para aprenden mucho sobre la vida y que no están en los libros. La educación se ha visto como un producto codificado… y eso no es la vida.

Antes de que en los libros hay que fijarse en lo que los niños llevan dentro. A veces cuesta convencer al docente que más allá del libro existen otras estrategias. Sería bueno revisar muchas más estrategias docentes para un aprendizaje significativo (Díaz, 2010). Cambio y fuera. (O)

[email protected]