Medidas de aplicación inmediata

Solo 28 de cada 100 jóvenes de entre 18 y 30 años cuentan con un empleo, pero por cada 100 hay 72 jóvenes desempleados o con empleos no adecuados. La mayoría de los empleados cuentan con estudios de tercer nivel, 2,4% cuenta con título de cuarto nivel y 20% cursa estudios de este tipo. A lo que se añade el dato de que el porcentaje de jóvenes con maestrías y posgrados es relativamente bajo.

Dice una encuesta reciente reproducida por la revista Ekos, que de los empleados el 86% gana de entre 394 y 800 dólares mensuales, el 13% entre 800 y 1.200 y el 1% restante entre 1.200 y 1.600. En abril de 2018, el 56% tenía contrato fijo, pero en abril de 2019 un 25% de los encuestados contó con contrato indefinido. Por donde se lo mire, quienes están en ese grupo de edades viven una catástrofe laboral (y social) que se mantiene como tendencia desde el año pasado y que no tiene cómo cambiar.

Esta es la situación del segmento de la población económicamente activa de 18 y 30 años, pero ¿cuál es la de quienes parten de ahí hasta la edad de jubilación? Según el INEC el empleo pleno cayó a 37,9% en marzo. Basta con andar y desandar las calles de cualquier concentración urbana para tener delante una vívida fotografía del tamaño y drama del desempleo y el subempleo en el país.

En los diálogos nacionales convocados por el Gobierno, los desafíos del mercado laboral deberían centrar el temario propuesto. Hay que tomar medidas de aplicación inmediata para revertir esta tendencia nefasta en el más breve plazo posible. Si en esto algo se necesita es acción y determinación.


Nuestras ideas pueden esclavizarnos o liberarnos”. Ken Robinson Escritor, profesor y orador inglés (1950)

Qué agradecida estoy, soy afortunada por tener… Una segunda oportunidad”. Kate Morton Escritora y novelista australiana (1976)