Que esmeraldas se ubique mejor

Cual bandadas de palomas llegan grandes y pequeños al nuevo año lectivo. Ya en el inicio del período de clases bien vale recomendar el camino a la excelencia de parte de los estudiantes bajo la conducción orientadora y educativa de los maestros, sin que el hogar descuide la enorme responsabilidad de formar y contribuir para el mejoramiento del hijo, a fin de que se ubique en competencia óptima con tantos más.

Las estadísticas han connotado el nivel del rendimiento en los últimos años en el Ecuador y Esmeraldas ha quedado a la cola, como lo está en algunas cosas, ¿culpa de quién? de las reformas educativas, de los educadores en un porcentaje y de los padres de familia. Se hicieron innovaciones pedagógicas perjudiciales para el educando: Todos pasan de año, no hay tareas para el hogar, todo es a base de la computadora, hay muchos maestros que envían trabajos y no los revisan ni corrigen minuciosamente, el estudiante no lee, no investiga en textos, todo lo tiene listo en la computadora para cortar y pegar sin consecuencia de causa peor de efecto.

La Ortografía ya no existe, cunde la barbaridad; la Caligrafía se fue a dormir eternamente, no importa escribir palo o piedra; la Dicción es desagradable, en muchos es sumamente vulgar y grotesca. Se fue de la mano la educación; el cálculo mental quedó para el recuerdo y para hacer historia; la calculadora habla por el alumno, las tablas de multiplicar quedaron para hacer memoria; la palabra mal escrita y mal dicha es aceptada, “no hay que perder el tiempo corrigiendo” dirán muchos, la ignorancia sigue manifestándose y con ello la torpeza y la vulgaridad, “la ignorancia sigue siendo atrevida”.

Y ¿qué decir del comportamiento? Ya no existe el saludo, muchas gracias, siga usted, después de usted, con gusto, con mucho gusto, disculpe, permítame, por favor, perdón, es un placer, muy gentil, es usted muy amable y tantas frases elocuentes dignas de mejor criterio para la gente fina, educada y distinguida. ¿Y del uniforme? bien lavado, oloroso, planchado con rayas en el pantalón y la camisa, medias blancas para el colegial, zapatos lustrados, bien brillosos, correa en el pantalón, pañuelo, corbata en días especiales, uñas recortadas y limpias, corte normal del cabello, falda a la rodilla (la alumna no es bailarina de salón), enagua blanca, sostén blanco, así debe lucir el estudiante bien formado y bien educado.