María José Salinas Terán
Con el nacimiento de la sociedad también nacieron los conflictos, indudablemente es un hecho la necesidad de buscar métodos que permitan dar solución a los problemas, los mismos que no necesariamente sean judicializados. Nuestra legislación reconoce a la mediación como un camino que permite fomentar la cultura de paz en nuestra sociedad. Por ende, la mediación se convierte en una salida ágil y oportuna para resolver discrepancias entre las partes.
¿Qué es la mediación?
La mediación es una forma alternativa para solucionar los conflictos, donde interviene una tercera persona imparcial que facilita el diálogo entre las partes en desacuerdo. El objetivo es llegar a un acuerdo en base a los intereses de todos los involucrados. Este acuerdo tiene el mismo valor jurídico que una sentencia ejecutoriada.
Es un procedimiento voluntario y confidencial lo que permite a las partes negociar de manera libre y productiva. Lo tratado en un proceso de mediación no tiene valor probatorio en un litigio, la mediación se puede solicitar en cualquier etapa de un juicio.
Cabe recalcar que solo es posible en materia transigible, es decir, en los asuntos en que la ley permite a las partes negociar y buscar una solución, casi en todos los ámbitos se puede mediar.
¿Cuáles son las ventajas de acudir a un centro de mediación?
Como es un acuerdo de voluntades no hay paso a la obligatoriedad, las partes acuden en búsqueda de una solución a sus controversias, las mismas que pueden ser solucionadas en una sola audiencia, siendo una ventaja el ahorro de tiempo y dinero con respecto a la alternativa judicial, así como permite restablecer la armonía y mantener la relación entre las partes en conflicto, si así lo desean. (O)