Redacción GUAYAQUIL
Los jueces de la Sala Penal del Guayas, ratificaron por unanimidad, la sentencia condenatoria a 34 años 8 meses en contra de Danny R.T., y Michelle M.B., por el delito de asesinato a un menor de dos años, quien era hijastro e hijo, de la pareja procesada.
El caso se registró el 27 de noviembre de 2017, en las calles 11 y Sedalana, Suburbio de Guayaquil, cuando el menor fue agredido violentamente por su madre y padrastro en el interior de su domicilio, con golpes en el pecho y rostro que le ocasionaron la muerte.
Según las investigaciones, el niño era víctima constante de malos tratos y tenía un historial médico de atenciones en varias casas asistenciales.
En la audiencia de juzgamiento, realizada en noviembre de 2018, el Tribunal de Garantías Penales del Guayas, acogió parcialmente la acusación de la Fiscalía y sentenció a la pareja procesada a 34 años 8 meses.
Sin embargo, el Ministerio Público apeló al fallo solicitando aumentar la pena a 40 años de prisión por la concurrencia de varios delitos como las torturas que sufrió el infante.
No obstante, la Sala Penal, conformada por los jueces Guillermo Valarezo, Juan Paredes y Fabiola Gallardo, no acogió en su fallo esta última infracción, por lo que se abrirá un nuevo expediente por el delito de tortura, según anunció el fiscal del caso, César Peña Morán.
Durante la audiencia de apelación a la sentencia, realizada el miércoles 17 de abril, la Fiscalía hizo un recuento de las pruebas documentales obtenidas como la autopsia médico legal, la historia clínica del menor, el reconocimiento del lugar, la pericia psicológica forense y la pericia psiquiátrica que reveló los perfiles de “psicopatía criminal” en ambos procesados, quienes tuvieron “juicio, voluntad y conciencia” al momento del delito.
Además de la abundante prueba testimonial con la comparecencia de 26 testigos durante la audiencia de juicio, entre familiares y amigos, que señalaron al menor como víctima de violencia al interior de su hogar.
La Fiscalía procesó a los dos ciudadanos con base en el Art. 140 del Código Orgánico Integral Penal (COIP), numerales 1 y 4 (dar muerte a su descendiente y colocar a la víctima en situación de indefensión o aprovecharse de la situación) que sanciona el delito de asesinato con pena privativa de libertad de 22 a 26 años. (DAB)