Cinco artistas mujeres experimentan la feminidad a través del bordado

EXPOSITORAS. Emillye Díaz, Elena Heredia, Isabel Llaguno, Pamela Suasti, Clio Bravo.
EXPOSITORAS. Emillye Díaz, Elena Heredia, Isabel Llaguno, Pamela Suasti, Clio Bravo.

La muestra busca incentivar la creación de espacios artísticos gestionados por mujeres.

Abordar las técnicas de tejido y bordado implica explorar un arte que históricamente está relacionado con lo femenino. Cinco jóvenes artistas se toman la galería de Wampra Arte-Bar con la exposición ‘No hablarás por nosotras’, donde la técnica milenaria converge con un concepto contemporáneo.

Emillye Díaz y Elena Heredia, curadoras de la muestra, pensaron en esta como una oportunidad para apropiarse del espacio por medio de una gestión conjunta entre mujeres.

“Tenemos todos estos nuevos intentos de acoger el discurso femenino, pero que siempre están dados desde la posición privilegiada de un hombre”, dice Díaz.

‘No hablarás por nosotras’ responde a la necesidad de reafirmar la voz femenina en la sociedad: “La cosa es que nosotras enunciemos nuestras necesidades, vivencias y perspectivas, no que alguien venga y nos diga ‘puedes hablar, te doy el permiso de hablar’”.

Concepto

Díaz sostiene que la muestra une las técnicas del tejido y el bordado con “la perspectiva de la feminidad y la vivencia femenina de cada artista”.

TOME NOTA
La muestra estará abierta hasta el 16 de marzo. En la clausura se realizará una sesión de bordado abierta al público a las 16:00.Las curadoras iniciaron una investigación en los círculos de jóvenes artistas para hallar mujeres que tuvieran experiencia con estas técnicas. “Queríamos visibilizar a quienes han desarrollado sostenidamente el tejido -dice Heredia-. Nos dimos cuenta de que existen muchísimas artistas que trabajan alrededor de lo textil, que están construyendo proyectos”.

Obra

Pamela Suasti, una de las artistas participantes en la muestra, dice que es necesario que en la ciudad se abran espacios para exhibir el arte hecho por mujeres: “He expuesto, la mayoría de veces, solo con hombres. Encontrar esto y construirlo es gratificante”.

Para ella, la muestra valida la producción de las artistas y las permite proyectarse ante lo que sucede actualmente con la lucha femenina desde su forma de expresión.

EL DATO
El 7 de marzo se realizará una visita guiada por la exposición, desde las 18:30.Su obra, ‘Imposibilidades’, es una composición de páginas arrancadas de libros que hablan del amor, en donde el texto ha sido cubierto por el tejido.

“La intensión es ir sanando un montón de cosas que he tenido por dentro y que no se han podido sanar a través de palabras ni acciones”, afirma la autora.

Las artistas coinciden en que el acto de bordar tiene cierto sentido terapéutico. “Implica tu presencia física y mental. Este gesto de bordar, este ritual de estar sentada tejiendo es algo que te envuelve. Te deja ensimismado”, dice Suasti.

Para ellas, bordar no es una actividad exclusivamente de mujeres. Díaz sostiene que debemos superar las barreras mentales y sociales que vetan ciertos oficios y actividades a un género determinado: “El bordado sí tiene una fuerza histórica femenina, que va a encontrar una persona que se acerca a esa técnica, pero no es un limitante”. (AA)