POR: Laura Benítez Cisneros.
Nuestra nación ecuatoriana es el conjunto de individuos nacidos en el territorio que comprende nuestro Ecuador y estamos sometidos a las leyes y autoridades, con tradiciones, cultura, costumbres, y como principal legado su historia.
Hay algunos fundamentos que forman la vida de nuestra gente y son de carácter histórico, geográfico y étnico, como fundamento de carácter histórico podemos manifestar que son el conjunto de hechos y hazañas gloriosas realizados por nuestros antepasados; las hazañas no solo de carácter bélico sino la fecunda obra que por el progreso de nuestra Patria han desarrollado destacadas celebridades políticas, que pueden ser considerados como verdaderos forjadores de nuestra nacionalidad ecuatoriana.
Como fundamento geográfico tenemos el sagrado suelo que pisamos, donde se encuentra nuestra nación con sus diversas peculiaridades del clima, relieve, paisaje, producción y sus cuatro regiones bien marcadas: Costa, Sierra, Oriente y la región Insular de Galápagos y que son admiradas por cuantos extranjeros nos visitan. Este es el factor determinante para el desarrollo y forma de vida de nuestra gente ecuatoriana en las regiones del país.
En cuanto a nuestra etnología, podemos basarnos en nuestro idioma y la diversidad de etneas a las que pertenecemos los ecuatorianos, sus tradiciones y costumbres.
Las tradiciones son los legados que hemos recibido de nuestros antepasados, las costumbres son las características propias de nuestra nación, su forma de gobierno, las instituciones públicas, privadas y otros.
Estos fundamentos cívicos son los que tenemos que hacer conocer a las nuevas generaciones, para impartir el conocimiento básico de lo que verdaderamente significa nuestro suelo, su gente, la forma de vida pacífica y tranquila, que puesta en manos de las autoridades de educación se puede hacer realidad.