América Latina se une para salvar al jaguar

ESPECIE. El Salvador y Uruguay han perdido por completo las poblaciones de jaguar. (Foto: Richard Barrett / WWF-UK)
ESPECIE. El Salvador y Uruguay han perdido por completo las poblaciones de jaguar. (Foto: Richard Barrett / WWF-UK)

Países de Latinoamérica y organizaciones de conservación se unieron en un compromiso para salvar al jaguar, el felino más grande del continente y presentaron en la 14 Conferencia de las Partes (COP-14) del Convenio sobre Diversidad Biológica, que se realiza en Sharm El-Shelkh (Egipto), un plan que busca fortalecer los sitios por donde se mueve.

Además, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) y la Sociedad para la Conservación de la Vida Silvestre (WCS) anunciaron que en la búsqueda de la conservación del felino, se decidió establecer el 29 de noviembre de cada año como el Día Internacional del Jaguar para generar conciencia sobre las amenazas que enfrenta y la necesidad de protegerlo porque es una especie clave e indicadora de un ecosistema saludable.

Protección y conexión de su hábitat

El Plan busca fortalecer el Corredor Jaguar, que se extiende desde México hasta Argentina, al asegurar 30 paisajes prioritarios de conservación de esta especie para el año 2030, mitigar el conflicto entre humanos y jaguar, conectar y proteger los hábitats del felino, estimular oportunidades de desarrollo sustentable, como el ecoturismo, apoyar el bienestar de las comunidades locales y pueblos indígenas que coexisten con él.

Midori Paxton, la líder de Biodiversidad y Ecosistemas en PNUD, dijo que el Plan ayudará a proteger corredores clave para esta especie, de forma que se fortalezcan alternativas de vida sustentables para las comunidades locales y surjan nuevas oportunidades de negocios para el ecoturismo y la agricultura sostenible.

El jaguar es el carnívoro más grande de América Latina, con distribución en 18 países. Sin embargo, el 50% del rango original de la especie se ha perdido y sus poblaciones están disminuyendo debido a la caza ilegal, el conflicto humano-jaguar y la pérdida y fragmentación de su hábitat. (WWF/CM)