La familia Vicuña tiene larga vinculación con AP y el poder

UNIDOS. La vicepresidenta, sus padres y hermanos.
UNIDOS. La vicepresidenta, sus padres y hermanos.

Al menos tres de los miembros de la familia Vicuña comenzaron a cumplir funciones, en varias áreas de la administración pública, con la llegada de Alianza País al poder en 2007. Otros se fueron añadiendo y saliendo con el transcurso de la década correísta. En la actualidad 6 miembros de la familia de vicepresidencial tienen cargos en instituciones públicas.

María Alejandra Vicuña, psicóloga clínica de profesión con un máster en administración de empresas ha tenido una larga vinculación, como funcionaria pública, durante la década correísta y ahora con la administración de Lenin Moreno.

Antes de ser nombrada como vicepresidenta de la república en octubre de 2017, fue miembro de la Asamblea Nacional durante dos legislaturas, la primera de 2009 a 2013, y la segunda, de 2013 a 2017. Pero al inicio, con Alianza País recién llegada al poder, en 2007, fue nombrada Coordinadora Regional de Talento Humano del Servicio de Rentas Internas (SRI).

En la administración Moreno, antes de asumir como segunda mandataria, fue nombrada Ministra de Desarrollo Urbano y Vivienda, en mayo 2017.

Familiares
Su padre, Leonardo Vicuña Izquierdo, también tuvo funciones desde los primeros años del correísmo, como miembro del Directorio del Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (Biess), vicepresidente del Directorio de la misma entidad y vocal del Directorio del Banco Central del Ecuador, entre otros.

Desde el 20 de diciembre del 2017 es presidente del Directorio del Banco de Pacífico, del cual forma parte desde julio de ese año. Además tiene participación en el directorio de seguros Sucre.

Sus remuneraciones actuales son de 15.000 dólares mensuales en el banco, más las dietas por sesión en la aseguradora.

Claudia Marcela Vicuña Muñoz, hermana de la vicepresidenta, desempeña funciones desde hace 11 años en la Procuraduría General del Estado. Su cargo actual es de secretaria ejecutiva, en la dirección regional 1 de la institución. En la página de transparencia de la Procuraduría no se registra su remuneración, pero a través del SRI se pudo constatar que en los últimos años ha pagado cero de impuesto a la renta, a excepción de 323,99 dólares en 2011.

Jaime Leonardo Vicuña Muñoz, el otro hermano de la vicepresidencia, sale de la esfera de influencia de Alianza País porque es funcionario de Aduanas del Ecuador desde hace 26 años. Su puesto es como asesor 2 en la Dirección General de la institución. La remuneración mensual unificada que percibe es de 3.418 dólares.

El miembro más reciente en la función pública es María Eulalia Pozo Vicuña, prima de la vicepresidenta. Su nombramiento como viceministra del Ministerio de Ambiente data de mayo 2017. Su remuneración mensual es 4.508 dólares.

Sin críticas
Al respecto, Juan Carlos Almeida Pozo, actual secretario de la Vicepresidencia, y acusado por el político Andrés Páez de ser familiar cercano de María Alejandra Vicuña, explicó que no tendría por qué criticarse nombramientos como el de Pozo Vicuña porque “está dentro de los límites del nepotismo y porque las designaciones no dependen ni de Leonardo ni de María Alejandra, ni se dan por tener el parentesco”, dijo.

Con respecto a su caso, Almeida reconoció que fue nombrado por la vicepresidenta, pero argumentó que no es primo, y aunque si tiene un parentesco de familiaridad, este “no es ni del tercero ni cuarto grado”. (JS)

Los que salieron
° Beatriz Vicuña, hermana de Leonardo Vicuña, trabajó hasta 2016 en el Ministerio de Inclusión Económica y Social, pero actualmente está jubilada.
Fernando Vicuña Izquierdo, tío de la vicepresidenta, fue coordinador zonal del ministerio de Salud Pública, de mayo 2012 a agosto 2013. Luego de lo cual, según su propia versión, ha continuado con el ejercicio de la docencia universitaria.

Mi opinión en 30 segundos
Rodrigo Villavicencio, abogado penalista

Riñendo con la ética
° Aunque no se puede hablar estrictamente de nepotismo, porque la Ley Orgánica del Servicio Público establece que se deben cumplir los criterios de que el funcionario público sea la autoridad nominadora, y que el allegado favorecido esté comprendido en hasta el cuarto grado de consanguinidad y segundo de afinidad, el caso de varios miembros de la familia Vicuña retrata las prácticas extendidas del palanqueo y la utilización de las influencias políticas.

“Es una práctica reñida con la ética y contraria a la trasparencia en la administración pública. Aunque la vicepresidenta no haya nominado directamente a sus parientes, la evidencia indica que la cercanía al partido en el poder favorece este tipo de nombramientos”, dijo.

Además añadió que, en general, el peligro de este tipo de prácticas es que puede generar las condiciones para la corrupción. “No solo en el caso del nombramiento de familiares o allegados, en los últimos años hemos visto cómo las designaciones por amistad o conveniencia han propiciado la negligencia y el encubrimiento de actos dolosos”, concluyó.