Sinfonía

Andrés Pachano

Los asuntos de la sensibilidad, no siempre son fáciles. Su decurso para colmar el alma –entendida esta desde una visión existencial- con la pasión de lo sublime, siempre, por contradictorio, es una senda de dificultades. Eso fortifica los empeños.

La Banda Sinfónica Honorable Gobierno Provincial de Tungurahua, durante ya 25 años ha hecho ese duro pero satisfactorio recorrido, de las angustias a la facultad de sentir, de expresarse, de motivar, de sentar simiente en la cultura musical en este centro del país; sin lugar a equivocaciones su importante recorrido, ha generado el nacimiento de varias agrupaciones musicales de buen nivel, que aportan al cimiento de esta manifestación cultural en la provincia. Uno de sus logros es ese.

Y, en ese constante trabajo de llegar con el sentimiento a todos los estratos económicos de la población de la provincia, a más de sus conciertos regulares, meta primaria que se han impuesto es la niñez; para ello han diseñado un programa de conciertos didácticos, que se suceden con rigurosa persistencia; en lo que va de este año, por ejemplo, la Banda ha realizado 16 de ellos, dirigidos a más de 10 mil niños de instituciones educativas de la provincia, es un proyecto de difusión de la cultura musical realmente encomiable.

El pasado jueves 5 de julio, la Banda Sinfónica ofreció un concierto de homenaje a la provincia, por conmemorar sus 158 años de provincialización; el evento se cumplió con lucidez y con un público cariñoso en la Iglesia de Huachi Chico, colmada en su capacidad. El programa de esa noche, se desarrolló desde lo estrictamente académico hasta lo popular y anónimo, que emocionó a un público fraterno. Concierto que viajó desde lo épico de Von Supe, pasando por la tercedumbre de Mascagni, hasta las hondas nostalgias de José Ignacio Canelos o lo festivo de una “Vuelta del chagra”.

El público se emocionó hasta la ovación, con la melodía ‘Aún amándote’ (Still loving you) de la banda alemana de Hard Rock: ‘Scorpions’, esa suerte de metáfora –según los entendidos- de la división entre las entonces alemanias: occidental y oriental; es que en el rock, fuera de estereotipos, también hay ternura.