Ecuador se ‘juega’ su futuro en la consulta, afirman políticos

URNAS. Los ciudadanos podrán decidir el camino que quieren para el país.
URNAS. Los ciudadanos podrán decidir el camino que quieren para el país.

El Ecuador se prepara para acudir el 4 de febrero a las urnas con el objetivo de pronunciarse sobre las siete preguntas que el Ejecutivo ha presentado para la consulta popular. Desde varios sectores legislativos, la valoración que dan a este proceso en su conjunto va desde que significará la recuperación de la institucionalidad, el ejercer el derecho a decidir sobre el camino que se quiere para el país, el combatir la corrupción, e incluso desde el sector ‘correísta’ de Alianza PAIS –que cuestiona la consulta- dicen que será regresiva en derechos.

Para la asambleísta Silvia Salgado (PAIS-PS), lo que está en juego es la participación de manera protagónica de la ciudadanía y que asuma su corresponsabilidad en el desarrollo del país, que se empodere del proceso para recuperar el tema ético, ratificar los derechos de los niños, niñas y adolescentes, que se sume al combate de la corrupción, que sepa cuáles son las funciones de las autoridades… “Ya no vamos a tener a quién echar la culpa si nos equivocamos”, dijo Salgado.

‘Contra la impunidad’
Por su parte, el asambleísta Vicente Taiano (PSC) considera que al plantarse preguntas como la prohibición de la reelección indefinida o el cese de funciones de los integrantes del Consejo de Participación Ciudadana y que se establezca un transitorio con potestad de designar nuevas autoridades de control, significará devolverle la institucionalidad y la seguridad jurídica al Ecuador. “Más allá de ‘descorreizar’ creo que en 10 años de concentración (de poder) han pasado muchas cosas. La impunidad campea, los escándalos de corrupción están saturando los editoriales de la prensa, pero tenemos que devolverle la seguridad jurídica al Ecuador”, dijo Taiano. Añadió que es necesario el cambio a través de la consulta popular para atraer la inversión extranjera y fomentar la inversión con reglas claras.

“Ojalá haya estabilidad, mayor independencia de funciones, que retorne la tranquilidad al país con una institucionalidad sólida que permita recuperar lo económico”, respondió el asambleísta de SUMA Héctor Yépez, al consultarle qué es lo que espera de esta consulta. Agregó que es importante establecer un marco de estabilidad al Gobierno como elemento fundamental para atraer inversiones, que a su vez coadyuvan en la generación de empleo.

Qué opinan los gremios
Desde el lado gremial también tienen sus expectativas. El presidente de la Cámara de la Industria de la Construcción (Camicon), Silverio Durán, toma la palabra al presidente, Lenín Moreno, quien al promover la consulta ha dicho que es el pueblo quien en su calidad de mandante debe fijar el rumbo. “Lograr nuevamente que el Ecuador tenga la confianza y la tranquilidad en todos los ciudadanos para poderse expresar, para decir lo que realmente siente”, dijo Durán. Asegura que la consulta popular es el polo opuesto de esa restricción que, afirma, existía para que el ciudadano pueda expresarse con libertad. “El Presidente ha dicho que con estas siete preguntas busca un Ecuador mejor y es lo que todos pretendemos, que salgamos de la crisis”, dijo el dirigente gremial.

La visión “correísta”
El ala ‘correísta’ de Alianza PAIS, que cuestiona principalmente tres preguntas, ha manifestado que la consulta es regresiva en derechos, que es inconstitucional e inclusive atentatoria a un Estado democrático. Por eso el asambleísta Esteban Melono duda en afirmar que los ecuatorianos no deben esperar nada del proceso. “Lo que busca es eliminar los derechos de los ecuatorianos así como la libre postulación”, dijo. (HCR)