Redacción ESMERALDAS,
LA HORA
El ritual es corto pero altamente ceremonial. Cuatro mujeres, todas vestidas de blanco, junto al mar, evocaron recientemente a sus ancestros afro antes de empezar el pacto con los elementos que las rodean: el aire, la tierra, el agua y el fuego.
El lugar escogido en esta ocasión fue la playa de Portete, cantón Muisne, zona sur de Esmeraldas, uno de los sitios ícono para la negritud. A esas costas arribaron hace 464 años 23 negros libertos: 17 hombres y seis mujeres, entre ellos Antón y Alonso de Illescas, este último declarado el 2 de octubre de 1997 por el ex Congreso Nacional héroe nacional. Además, en esa misma fecha se institucionalizó el Día Nacional del Negro.
Entre los afros escogidos para el ritual en honor a los cuatro elementos de la naturaleza, estuvieron María de Lourdes Valencia, Raquel Quiñónez, Wendy Mosquera e Inés Morales. Cada una explicó lo importante de respetar al aire, la tierra, el agua y el fuego, de lo cual dicen no es la inspiración del momento, sino el conocimiento entregado por sus antepasados a través de la palabra.
Marimba y cantos
Entre rezos, las mujeres piden a sus ‘hermanos’ negros que cierren los ojos, levanten la frente hacia el cielo y abran las manos simulando recibir algo. Todos lo hacen con tal solemnidad que, por momentos, pareciera que entran en trance, mientras el sonido del mar es lo único que apenas interrumpe las voces de aquellas damas.
De pronto, sus voces son reemplazadas por dos cantores, quienes al ritmo de la marimba, el cununo, el bombo y el guasá arman una verdadera fiesta junto al mar en honor a los cuatro elementos indispensables para la vida.
Es tanto el orgullo de los afros por la isla de Portete, que buscan su declaratoria como Patrimonio Cultural de Ecuador. Se lo pidieron a sus santos y a las autoridades terrenales.
Todo el acto se realiza por el suceso de rebelión de aquellos 23 negros que se liberaron de sus ‘patronos’ luego de encallar el barco que les llevaba a Perú y que hasta ahora sigue en las profundidades del mar.
¿Quién habla de las mujeres?
Pero eso no es todo. Los afros también anhelan que se institucionalice el arribo de sus cimarrones Alonso de Illescas y el ‘Negro’ Antón, líderes del proceso libertario, donde también estuvieron seis mujeres.
¿Y qué pasó con las mujeres?, ¿qué nombres tenían?, ¿por qué no hablamos de ellas?, son las interrogantes de los celebrantes que armaron toda una romería que empieza con una caminata de dos horas junto al mar.
Los nombres de aquellas negras ahora son simbolizados por Zoila Espinoza Minda (Mamá Zoila +), la ‘Reina de la bomba’ en El Chota y Martina Carillo (+), lideresa negra, quien junto a tres parejas de esclavizados de la hacienda La Concepción huyeron a Quito para presentar a las autoridades sus quejas por el maltrato recibido. Pero también el grupo de las seis simboliza a todas las mujeres negras del Ecuador. (MGQ)
Biografía de Alonso de Illescas
° Alonso de Illescas nació alrededor de 1528 en África, en la región de Cabo Verde, actual Senegal. A la edad de 10 años, aproximadamente, fue capturado por los negreros y llevado como esclavo a España. Fue bautizado y confirmado en Sevilla con el nombre de Enrique, pero más tarde tomó la denominación de su amo.
Tuvo la oportunidad de aprender la lengua de los dominadores, su forma de vivir, educar a los hijos, guerrear y hasta los entretenimientos. Se volvió hábil en el uso de las armas y también en instrumentos musicales propios de las grandes familias de la época.
Alrededor de los 25 años fue traído a América por la familia de los Illescas, quienes lograron constituir una especie de empresa comercial entre Sevilla y Lima. En octubre de 1553, navegando desde Panamá hacia Lima, el barco del mercader Alonso de Illescas tuvo muchas dificultades por las corrientes y el tiempo adverso, además se quedó sin provisiones.
