Pos correísmo…

POR: JOFFRE DAZA QUIÑÓNEZ

Con hechos nada agradables, descubrimiento de un abuso de poder total, corrupción, robos disfrazados de coimas, dádivas, premios, comisiones, que fueron la regla en todos los contratos del Estado durante la década perdida. Pero el mayor atraco está en la venta anticipada de petróleo, donde se ha dejado hipotecado los ingresos por concepto de venta de petróleo a largo plazo.

Toda una organización de delincuentes enquistada en el Estado, con abogados, séquito de asambleístas, Contralor, Fiscal y jueces dispuestos para cumplir las órdenes que venían de Carondelet, sumado a ello crearon la famosa Comisión de Participación Ciudadana que se encargaba de nombrar a los miserables que vendieron la patria y la Supercom, representada por un sujeto que casi le faltaba ladrar para lamer y aplaudir las órdenes que le daba su patrón Correa cuando se trataba de sancionar a los medios de comunicación o periodistas que se atrevían a opinar en contra de los funcionarios corruptos.

Conforme han ido descubriéndose los delitos de concusión, lavado de activos, enriquecimiento ilícito, peculado, cohecho cometidos por todos los miembros del gobierno que se fue, responsables de firmar contratos o hacer control, no fueron descubiertos por las autoridades judiciales o del Ministerio Público; se conocieron por las investigaciones hechas en los EE.UU, lo que permitió poner al descubierto la trama de corrupción mediante la cual se hacían los pingues negocios.

Los sapos dejaron todos sus funcionarios para que les cubran las espaldas, no contaban con la astucia del nuevo Presidente, quien obligó a que se cumpla con los procedimientos de enjuiciamiento y sanción a los corruptos, ahora a tomar de su propio chocolate los Glas y camarilla, le salió el tiro por la culata, el cálculo de quedarse en el país era a sabiendas que lo iban a declarar inocente, se encontró con una Fiscal incorruptible como Diana Salazar. A pagar en la cárcel Glas. Es imperativo que la ayuda del gobierno Suizo permita recuperar todo el dinero que se han robado, así sea.

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