A la Virgen de las Mercedes se la celebra en Playa de Oro

TRADICIÓN. Las aguas del río Santiago reciben cada año a la Virgen de Las Mercedes en Playa de Oro. (Foto: ‘El santoral católico afroecuatoriano’)
TRADICIÓN. Las aguas del río Santiago reciben cada año a la Virgen de Las Mercedes en Playa de Oro. (Foto: ‘El santoral católico afroecuatoriano’)

El despertar sonoro, la balseada, los arrullos están listos para homenajear a la patrona de la comunidad afrodescendiente.

El 24 de septiembre de cada año es un acontecimiento especial en Playa de Oro, la última comunidad con población mayoritariamente negra, a la que se llega subiendo por el río Santiago, en el límite de la Reserva Ecológica Cotacachi-Cayapas, en Esmeraldas.

Es el día en que, según John Antón, antropólogo e investigador del pueblo afroecuatoriano, se venera, desde la Colonia, a la Virgen de Las Mercedes. Es una comunidad que dice ser un pueblo con historia de ancestros, del África Negra y así lo promocionan cuando se acercan estas fiestas.

En ‘El santoral católico afroecuatoriano’ Antón escribe: “tomando posturas de un esencialismo antropológico, Playa de Oro es el lugar perfecto para deificar una comunidad ancestral. Esta pequeña comunidad es una comuna o territorio colectivo propio, comprado por los mismos esclavos desde tiempos coloniales, cuando era un Real de Minas…”

Preparación especial

La celebración de la fiesta patronal en honor a la Virgen de las Mercedes parece aumentar el vínculo con los valores espirituales, familiares, de producción y de intercambio. Y aunque no es el único lugar donde se la festeja, congrega a lugareños, turistas, parientes, devotos, autoridades, curiosos y fiesteros de todas partes de Esmeraldas y del país.

En esta comunidad que pertenece a la parroquia Luis Vargas Torres del cantón Eloy Alfaro, es el Consejo de Mayores, la Junta del Cabildo y las autoridades de la Junta Parroquial los que organizan los eventos de la fiesta. No participa la Iglesia Católica. Y según Antón, el programa se organiza de manera meticulosa, con una planificación que busca reproducir cada una de las ceremonias, rituales y demás expresiones festivas.

La celebración comienza el 21 de septiembre con una gran minga colectiva para limpiar y embellecer el entorno. El 22 en la tarde se realiza el Pregón de fiestas y en la noche una velada artística cultural para elegir a las reinas del pueblo y terminar con baile popular.

PROCESIÓN. Por las calles angostas y empedradas es llevada la Virgen de Las Mercedes en hombros los fiesteros. (Foto: ‘El santoral católico afroecuatoriano’)
PROCESIÓN. Por las calles angostas y empedradas es llevada la Virgen de Las Mercedes en hombros los fiesteros. (Foto: ‘El santoral católico afroecuatoriano’)

Ritualidad

El 23 de septiembre, desde las 04:00, y por el lapso de dos horas, se realiza un despertar sonoro para saludar a la Virgen de las Mercedes, con un toque de campana especial, con una melodía que combina compases al unísono con los tambores (cununos y tamboras pequeñas o redoblantes).

A las 11:00 se realiza la ‘Balsada en honor a la Virgen’. Es el momento en que se saca a la imagen de la iglesia y se la acomoda en una balsa adornada con palmas, flores y frutas del lugar y que está sobre las aguas del río Santiago. Comienzan los arrullos que junto a lo tambores le ponen el toque africano a la celebración.

El mismo 23 a las 23:00 comienza el tradicional arrullo que se lo realiza en la iglesia donde previamente se ha colocado a la Virgen en un altar especial. Es allí donde las cantadoras, músicos, cununeros y bomberos, los rezantes y fiesteros arrullan a la Virgen toda la noche sin parar. Apenas asoma el alba en la mañanita del 24 de septiembre los tambores se apagan para más tarde volver a encenderse. (CM)

El día clásico

El día propio de la Virgen de las Mercedes es el 24 de septiembre. En su honor se realiza el desfile cívico con la participación de estudiantes, reinas, uniformados y autoridades; luego viene la sesión solemne del cabildo y los festejos son seguidos con baile y mucha música.

A las 15:00 las campanas vuelven a convocar a los rezos en la iglesia a los pies de la Virgen y se da inicio a la segunda balsada con una procesión hacia el río Santiago, pero esta vez la imagen principal de la fiesta sale acompañada de San Pedro, San Pablo, San Antonio, San Francisco, San Martín de Porres y la Virgen del Rosario, en un reencuentro entre lo personajes del mundo de lo divino.

Es el momento en que se paralizan las actividades, la música se calla, mientras las campanas no dejan de sonar, los tambores se tocan con más fuerza y se escucha el arrullo en todo el pueblo.

Arrullo a la Virgen de Las Mercedes

Mercedes cuando te vayas (verso libre)

me dejarás tu corona

para que yo cuando muera

vaya derecho a la gloria.

A la Mercedes la quiero,

A la Mercedes la adoro.

Porque la Mercedes tiene,

la llave de mi tesoro (verso libre)

(Remberto Escobar 1999:41)