Miembros de la nacionalidad tsáchila aprendieron de sus ancestros la habilidad de domesticar a las culebras.
SANTO DOMINGO DE LOS TSÁCHILAS
Emilio Calazacón es conocido también como el ‘domador de culebras’, en idioma tsáfique se pronuncia ‘Zayamá piní’.
Desde pequeño, este hombre empezó a conocer los tipos de serpientes que existían para determinar cuáles eran las venenosas y las que podía domar. “Nuestros ancestros tendían a encontrar culebras en la finca cuando realizaban los trabajos de agricultura y tenían la habilidad de agarrarlas vivas, fui observando y aprendiendo”, comentó Calazacón.
Para atrapar al animal utiliza un palo delgado que tiene una abertura en los extremos, esto ayuda a sostener el cuello para evitar las mordeduras, también suele colocar agua azucarada en la cabeza. Esto sirve para que el animal se tranquilice. Además, a diario la acaricia con las palmas de las manos para que sientan que no son dañinas.
Un lugar para conocer a estas especies
Desde hace cuatro meses una de las culebras (‘Zayamá’) domesticadas por Emilio se encuentra en la comuna Chigüilpe del centro turístico ‘Muishily Abraham Calazacón’, lugar donde los visitantes conocen los tipos de serpientes y los beneficios que tienen dentro de la nacionalidad. “A los turistas se les da a conocer las medidas de seguridad que deben tener al encontrarse con una de estas especies”, acotó.
Se les explica que la culebra X (Zapini) y la coral (Sununpiyi) son peligrosas por su veneno. Mientras que a la boa domesticada la utilizan como terapia para eliminar el temor al animal mediante el uso del tacto.
De uso medicinal
También estas serpientes son utilizadas para elaborar antídotos naturales. Por ejemplo, la X, dicen, es adecuada para curar un sinnúmero de patologías, luego de ser pelada, cortada la cabeza y el rabo, y puesta en un recipiente de vidrio con alcohol etílico por el lapso de un año o año y medio.
Solo se utiliza la culebra X, no puede ser otro tipo de reptil, puesto que tiene el componente para curar. También es usada para exhibiciones y para hacer limpiezas por espanto de serpiente o espanto de agua. Según Emilio, no hay culebras enfermas, son animales sanos y limpios, por esto el preparado va purificando el cuerpo y, además, ayuda a los problemas de granos y sirve como cicatrizante. (DA)
Medicina en exhibición
En la comuna hay un stand donde se explica a los turistas los beneficios de la medicina sacada de la culebra X. También se puede observar a una serpiente disecada que mide 2 metros con 30 centímetros que se mantiene en buen estado gracias a su conservante natural.
