Entre naves espaciales

El artista ecuatoriano Toño Cepeda. Foto: cortesía de Daniela Arosemena
El artista ecuatoriano Toño Cepeda. Foto: cortesía de Daniela Arosemena

Toño Cepeda se embarca en su propio vuelo musical con ‘La vida en el espacio’.

CARLO CELI

Hace un par de semanas me encontré en un café con Toño Cepeda, allí al fin pudimos hablar de su nuevo disco ‘La vida en el espacio’, producción que hizo su lanzamiento en Quito, el pasado sábado 22 de julio, con un concierto espectacular, que convocó a las bandas Cometa Sucre y El Extraño.

Previo a la entrevista pude escuchar su disco y darme cuenta que ‘La vida en el espacio’ es un trabajo que sabe equilibrar la parte más emotiva y acústica de Toño con su contraparte más visceral y punkera; está detalladamente compuesto por sensaciones e imágenes que casi literalmente viajan por momentos sonoros que Cepeda supo expresarlos con un estilo reconocible y propio, forjado en toda su trayectoria musical.

“Pienso que este disco me desnuda un montón como persona, es un álbum bien ecléctico y está compuesto sin mucha pretensión de nada. Es un viaje que va por muchos momentos, a veces acústicos, a veces va al punk o lo rocanrolero. Es una búsqueda y nace de una necesidad de seguir haciendo cosas y permanecer en movimiento, de seguir creando y de no parar”, explica.

Toño antes pasó por varias bandas como Biorn Borg, Can Can o Rarefacción, entre otras, pero esta es la primera vez que hace algo de solista, algo que lleva en la portada de su álbum su nombre y apellido. Cepeda amalgamó este trabajo durante los años en los que se cambió de casa, de región, de amigos y hasta de clima. Guayaquil es su actual casa y esos cambios no son gratuitos.

“El disco tiene un hilo conductor sonoro marcado por los synths y otras cosas, cuajó en un tiempo donde se acabó mi anterior banda, Biorn Borg, luego me mudé a Guayaquil y pasaron un montón de cosas y me vi en ese momento un poco sin piso, sin mis panas, sin mi banda que murió súbitamente, entonces fue este proceso como de reencontrarme en la manera de habitar mis espacios”, explica.

“De a poco se armó ‘La vida en el espacio’, después entendí de lo que se trataba. Luego descubrí la frase ‘soy mi propia nave’ que habla sobre la individualidad y cómo ‘tripearla’ de forma intensa. Hay esta analogía con el espacio exterior pero no solo significa eso, sino un viaje por los espacios interiores y virtuales y cómo los habitas y transitas. El álbum invita a eso, a ser tu propia nave”, agrega Toño mientras se toma un café.

Creación

Toño sin preproducciones pero con una imperiosa necesidas de ‘vomitar’ todo lo que tenía que expresar musicalmente, se juntó un día con Ivis Flies y Ernesto Karolys para emprender el viaje que ahora se ha transformado en su primera producción en solitario.

EL DATO
El videojuego del álbum puede bajarse gratis por Google Play.“Al final dije ‘voy a hacer el disco con el Ivis, un tipo al que yo admiro y quiero mucho y también con el Ernesto Karolys. Fui con una guitarra, les dije a los manes ‘estos son los temas’ y no hicimos preproducción. Empezamos a arreglarlos y a grabarlos durante cinco días de encierro”, especificó.

“También fue un disco de colaboraciones, me reuní por ejemplo con Juan Fernando Andrade (escritor) e hicimos algunas letras, también con Luis Borja y el proceso de grabación estuvo marcado por el ir y venir de Guayaquil, entre grabaciones de guitarras, voces, synths”, comentó el músico quiteño.

El manejo gráfico del álbum tiene una estética como de videojuego ochenteno de 8 Bits, peculiaridad que le da un toque retro al álbum y que combina con el juego de sintetizadores que componen algunas de los 12 temas del disco.

“Todo parte del asunto de la nave de la vida en el espacio, si te fijas en la portada del álbum está inspirada en una escena de ‘Watchmen’, cuando el Doctor Manhattan se va de la tierra y construye una estructura solitaria en el espacio para sí mismo. Luego tuve la idea de complementar todo esto con un videojuego que lo hice con Rafa Matovelle y ya se lo puede descargar uno para celular”, expuso el vocalista.

‘La vida en el espacio’ definitivamente es un viaje introspectivo con paisajes estelares, una explosión, un ‘bang’ musical que acelera los sentidos y , a su vez, calma a la bestia interior que se expresa entre guitarras rítmicas que se acercan a un estilo punk-rock pero que casi imperceptiblemente se transforma en susurros acústicos.

Con ‘La vida en el espacio’ Toño mira hacia adentro y hace que todos regresen a ver.