AUTORA: Rocío Silva
Diríase que es una de las tantas heroínas que tiene el magisterio nacional, ella, la Srta. Inesita, como la llaman sus compañeros y sus estudiantes, se atrevió a hacer una investigación muy rigurosa sobre el pensamiento crítico, cuyo objetivo fue reformular la planificación curricular de nivel básico superior con el pensamiento crítico como eje transversal. Este proyecto brinda al docente una planificación microcurricular para fomentar el pensamiento crítico en el área de Ciencias Naturales y motiva a los estudiantes hacia la construcción de sus propios conocimientos, junto con el estímulo y fortalecimiento de las habilidades del pensamiento crítico en la toma de decisiones y la resolución de problemas.
Más allá de ser un trabajo académico de mucha valía, este trabajo es el compendio de toda una vida dedicada a la formación de niños y niñas desde el área de Ciencias Naturales. Inés Mena, se percató muy a tiempo -que en este proceso de cambio aparente, pero muy violento de la educación en los últimos 10 años-, a ella como docente, no le quedaba otra alternativa que sobrevivir y para ello debía demostrar que ser maestra es ir más allá de llenar matrices y vivir al susto de disposiciones contradictorias. A Inés Mena le preocupó desde siempre que los jóvenes salgan de los colegios, sin herramientas para expresarse, para cuestionar, para reflexionar, así que se puso a leer y leer todo cuanto llegaba a sus manos, sobre modelos educativos, de modo tal, que cuando ingresó a cursar una Maestría, se sentía tan contenta porque había encontrado un espacio, donde podía discutir con sus maestros sobre teorías y avances pedagógicos-curriculares.
Hubo quienes no creían en que su proyecto de tesis sería totalmente viable, posiblemente porque no tuvieron la visión que tuvo Inés de hacer de su trabajo como docente, el espacio vital de los sueños y la esperanza de mejores días para estudiantes reflexivos, críticos, cuestionadores. Ahí sigue la Srta. Inés Mena feliz y altiva, contando historias y realidades transformadas de sus estudiantes, sintiéndose satisfecha con su oficio y con su esfuerzo.