Los recicladores que trabajan en la planta de tratamiento de desechos sólidos de San Martín, al sur de Quito, se toparon con un espeluznante hallazgo.
Dos brazos humanos fueron encontrados ayer por la madrugada dentro de una funda de basura negra. Aparentemente las extremidades fueron cercenadas de su cuerpo y la Policía ahora investiga cómo es que fueron a parar hasta ese sitio.
Desde muy temprano, los agentes de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida y Muertes (Dinased) y Criminalística llegaron a la planta para levantar los indicios.
Las tareas de reciclaje suspendieron mientras los peritos policiales recopilaban la información forense.
Las extremidades fueron llevadas al Departamento Médico Legal para hacer el levantamiento de huellas necrodactilares y cotejar con la base de datos y así intentar identificar a qué persona corresponden los brazos.
Macabro hallazgo
Horas más tarde, la Policía recibió un reporte de que en el sector de Conocoto, en la urbanización 6 de Diciembre, hallaron un cadáver.
Se trataba de una mujer cuyos brazos los tenía cercenados. Los gendarmes ataron cabos y concluyeron que el caso de las extremidades halladas en la planta de procesamiento de desechos tendría relación con el cadáver encontrado horas más tarde.
EL DATO
La Policía está tras la pista del exconviviente para que aclare la situación.
Se trata de una mujer de 28 años identificada como Yadira N. A decir de su madre, Yadira Navas, quien fue victimada por su conviviente, con quien llevaba viviendo cerca de cuatro años en la parroquia de Conocoto.
Según la mujer, la hoy difunta dejó de dar señales de vida desde el último miércoles.
Las autoridades trasladaron el resto del cuerpo hasta el Departamento Médico Legal para hacerle una autopsia y revelar otras huellas de violencia. La muchacha deja un niño de 3 años en la orfandad. (FLC)