Estratagema

Miguel Ángel Rengifo Robayo

En el juego del ajedrez las mentadas no siempre serán evidentes, la reacción inmediata sólo es producto de la agilidad mental con que el jugador aplica de lo aprendido; por eso este juego será considerado un deporte científico.

Qué tiene de parecido con la coyuntura política actual donde el oficialismo ahora marca distancias y aprovecha el impulso desmedido de lo que han referido como “lucha ideológica” al interior del “correísmo”; cierto o no, lo que el Presidente Moreno ensaya es una estratagema hábil e inteligente desde la defensa de su condición: lo vulnerable y la aceptación.

Me atrevo a apuntar esta crítica desde una lectura somera y fuera de asuntos comprometidos, el conflicto radica en que el cambio en el modelo de gestión política ahora es distinto al de “corazones ardientes y manos limpias” “cambio de época” “década ganada” a ser más versátiles en saber escuchar, incluir, dialogar, tolerar.

En las redes sociales, si es lo propio, se han enardecido los “twists” de lado y lado, lo que en realidad merece atención es el punto de discrepancia y las diferencias entre el presidente Moreno y el “correísmo”; ese alarde de posiciones ante defensas de criterio ante la decisión del oficialismo actual nos da alternativas entre sumisión radical, indiferencia, o afrentas.

Los anuncios por parte de los medios masivos de la residencia indefinida del ex presidente Correa en Bélgica, los casos relacionados al tema corrupción, los acercamientos con la oposición del “correato”, el comodato de 100 años de la sede de la CONAIE, y otras acciones inmediatas del gobierno de Moreno han generado discrepancias y resentimientos, queda en verse las reacciones mínimas y el propósito estratégico de una convivencia política y social en el país.

Sensatez y gobernabilidad parecen ser dos de los ejes y timones de esta guía en nuestro país, los primeros días y meses del nuevo gobierno no paga novatadas y es imperioso ya concretar en acciones concretas.