EE.UU. insiste en combatir la droga desde la producción

Estrategia antidrogas no menciona medidas para reducir el consumo.
Estrategia antidrogas no menciona medidas para reducir el consumo.

Washington anuncia una estrategia presuntamente novedosa para reducir la oferta de narcóticos que produce Colombia, pero que no hace referencia al consumo.

WASHINGTON. Estados Unidos anunció una ‘nueva’ estrategia de lucha contra las drogas en Colombia, que tendrá como pilares la reducción de la producción, el desarrollo de las zonas rurales y la protección del medioambiente.

Para reducir la oferta, EE.UU. quiere reforzar la lucha contra el lavado de dinero. Para erradicar las drogas, prohibirlas, reducir su demanda y destruir los laboratorios de procesamiento. Todo esto vinculado con las acciones para llevar a los narcotraficantes ante la justicia.

Respecto a la seguridad y desarrollo del medio rural, la iniciativa aboga por promoverlos con la implementación del acuerdo de paz que el Gobierno colombiano alcanzó en 2016 con la extinta guerrilla de las FARC, además de invertir en estas zonas y facilitar el acceso a la justicia.

Esto incluye proteger a los líderes comunitarios que promuevan la aplicación de la ley, reducir la dependencia de los cultivos de coca, ampliar la regulación de los títulos de propiedad de las tierras y modificar la forma en que EE.UU. y Colombia miden sus progresos en esta materia.

Además, Washington ayudará a Bogotá en sus esfuerzos para vigilar y combatir los delitos ambientales cometidos por los grupos narcotraficantes.

En este punto ambos apostarán por medidas como la restauración de los bosques tropicales y la eliminación tanto de las zonas sembradas con cultivos de coca como de los refugios para los laboratorios, entre otros.

El comunicado estadounidense no menciona una polémica medida que quiere retomar Colombia como es la erradicación forzosa de cultivos ilícitos por aspersión aérea de glifosato, que está suspendida en el país desde 2015 por una orden de la Corte Constitucional, después de reconocer las consecuencias adversas para la salud de esta práctica.

Durante su viaje a Colombia entre el 20 y 21 de octubre, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, no se refirió a esto.

Durante su estancia en Bogotá, Blinken aseguró que para luchar contra el narcotráfico hay que abordar las raíces del problema, como la inequidad o «reducir la demanda en EE.UU. que es la que está alimentando toda la actividad ilícita». Al final, parece que se opta por lo primero. EFE