Las tropas rusas intentan aplastar los focos de resistencia en Mariúpol

Los rusos aseguran que las fuerzas ucranianas han sido expulsadas de todo el territorio urbano de Mariúpol. EFE

La ciudad de Mariúpol es considerada clave para las operaciones del Ejército ruso.

MOSCÚ/KIEV. Rusia continuó este sábado 16 de abril de 2022 intentando aplastar los últimos focos de resistencia ucraniana en la estratégica ciudad de Mariúpol, a orillas del mar de Azov, considerada clave para la marcha de la «operación militar especial» en Ucrania que el Kremlin lanzó el pasado 24 de febrero.

«No es una tarea fácil: los miembros del ejército regular (ucraniano), los infantes de marina, que estaban dispuestos a entregarse ya lo hicieron», afirmó el líder de la autoproclamada república popular de Donetsk (RPD) -en el este ucraniano-, el prorruso Denis Pushilin, en declaraciones al canal de televisión ruso Rossía-24.

Pushilin añadió que los miembros de los batallones nacionalistas que permanecen en Mariúpol «no tienen la intención de rendirse y, por tanto deben ser aniquilados».

Las milicias de la RPD, reconocida por Moscú como Estado independiente, participan junto con las tropas rusas en la batalla por hacerse con el control total de Mariúpol, ciudad en el sur de la región de Donetsk.

Según las autoridades locales, unos 20.000 civiles podrían haber muerto en la ciudad, donde aún permanecen unas 100.000 personas en condiciones de precariedad extrema.

Presión en el Donbás

Después de la retirada a finales de marzo de las tropas rusas de la región de Kiev y Chernígov, presentada por Rusia como un gesto de desescalada y por Ucrania como el resultado de la resistencia encarnizada de su Ejército, el peso de la campaña militar se ha trasladado al Donbás, a las regiones orientales de Ucrania.

Analistas militares de distinto signo coiciden en que hay indicios de que Rusia prepara una gran ofensiva en el Donbás, donde Ucrania mantiene una fuerza de más de 40.000 hombres.

Ante esta situación, el Gobierno de Kiev ha redoblado su peticiones de armamento pesado a sus socios occidentales, en particular a los países europeos.

«Ucrania necesita armas. No en un mes, ahora», escribió en Twitter el asesor de la Presidencia ucraniana Mijailo Podolyak, quien admitió que la Unión Europea proporciona armas, «pero no las que les hemos pedido».

Las cifras de cada bando

Rusia cifró en 23.367 las bajas mortales sufridas por el Ejército y otras formaciones militarizadas de Ucrania desde el comienzo de la «operación militar especial» en el vecino país.
Según las autoridades ucranianas, la bajas mortales de Rusia en 52 días de campaña militar ascienden a unas 20.000, cifra que supera la de las pérdidas del Ejército soviético en los diez años que duró la guerra de Afganistán.
Ninguno de los bandos ha confirmado las cifras de bajas en sus fuerzas. Como es habitual, esos datos se manejan como secreto de Estado. EFE