Una niña de dos años, nacida en Nueva Orleans y ciudadana estadounidense, fue deportada junto a su madre hondureña sin el debido proceso legal, según denunció un juez federal. Este caso genera preocupación entre las comunidades migrantes, incluyendo la ecuatoriana, ante posibles vulneraciones similares.
La deportación de una niña de dos años, ciudadana estadounidense nacida en Nueva Orleans, junto a su madre hondureña, ha encendido las alarmas sobre posibles violaciones al debido proceso en las políticas migratorias actuales. El juez federal Terry Doughty expresó «una fuerte sospecha» de que la menor fue expulsada sin las garantías legales correspondientes y ha convocado una audiencia para el 16 de mayo para investigar el caso .
El incidente ocurrió tras una cita rutinaria con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Nueva Orleans. A pesar de que el padre de la niña, también ciudadano estadounidense, solicitó que su hija permaneciera en el país bajo custodia temporal, ICE procedió con la deportación antes de que se resolviera la petición judicial .
Medios de comunicación estadounidenses han identificado a la madre como Jenny Carolina López Villela.
Este caso se suma a otros similares, como el de un niño de cuatro años con cáncer y su hermano de siete, ambos ciudadanos estadounidenses, deportados a Honduras junto a su madre sin acceso a atención médica adecuada .
La deportación ocurre justo cuando Estados Unidos libra una batalla judicial sobre la intención de Donald Trump de abolir la ciudadanía por derecho de nacimiento, tema que la Corte Suprema revisará el 15 de mayo.
La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, expresó su respaldo a la madre y aseguró que su gobierno seguirá de cerca el proceso legal. Mientras tanto, el padre de la niña presentó una demanda para solicitar su liberación.
Este caso se suma a otros errores graves en la política migratoria estadounidense, como el del salvadoreño Kilmar Ábrego García, deportado injustamente y enviado a una mega prisión en El Salvador, en un proceso aún sin corregir.
Implicaciones para migrantes ecuatorianos y de otras nacionalidades
La comunidad migrante ecuatoriana en Estados Unidos, que incluye a numerosas familias de estatus migratorio mixto, observa con preocupación estos acontecimientos. La posibilidad de que ciudadanos estadounidenses, especialmente menores, sean deportados sin el debido proceso legal representa una amenaza directa a sus derechos y seguridad.
Organizaciones de derechos civiles, como la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), han denunciado estas acciones como abusos de poder y han instado a las autoridades a garantizar el cumplimiento de las leyes que protegen a los ciudadanos, independientemente del estatus migratorio de sus familiares.
Ante este panorama, se recomienda a las familias ecuatorianas en situación similar buscar asesoría legal y mantenerse informadas sobre sus derechos para prevenir posibles vulneraciones.