La violencia disminuye en Perú tras 14 días de protestas

Protestas para pedir adelanto de elecciones generales.

Poco a poco se va normalizando la situación en las vías de comunicación y aeropuertos de las regiones de Perú. 27 personas han fallecido en las protestas.

Tras 14 días de protestas que exigen la renuncia de la presidenta, Dina Boluarte, y el cierre del Congreso, poco a poco se va normalizando la situación en las vías de comunicación y aeropuertos de las regiones de Perú, donde han disminuido los enfrentamientos y disturbios, de hecho este miércoles solo se han reportado manifestaciones pacíficas.

Desde el domingo 11 de diciembre, 27 personas han fallecido en las protestas, sobre todo en el sur del país, y el jueves 15 se decretó el estado de emergencia nacional debido a los enfrentamientos de manifestantes con las fuerzas de seguridad y los paros en carreteras e invasiones a aeropuertos y propiedades públicas y privadas ocurridas la semana pasada.

El aeropuerto Coronel FAP Alfredo Mendivil Duarte, de Ayacucho, ciudad donde han muerto diez personas, reinició este miércoles sus operaciones, según informó el Misterio de Transportes y Comunicaciones.

Con esta reapertura quedaron operativas casi todas las terminales aéreas del país, menos la de Andahuaylas, en la región de Apurímac, donde siguen las reparaciones de los daños causados en actos vandálicos la semana pasada.

La Superintendencia de Transporte Terrestre de Personas, Carga y Mercancías (Sutran) también informó este miércoles que se ha restablecido el tránsito en 153 puntos de la red vial nacional, aunque aún quedan 15 puntos con tránsito interrumpido, lo que afecta a cuatro vías nacionales en tres regiones (Cuzco y Puno, en el sur, y La Libertad, en el norte).

En este sentido la Panamericana Sur se encuentra aún cortada a la altura del Cuzco, donde medios locales han reportado varios bloqueos de la vía.

Las manifestaciones se mantienen este miércoles en el sur del país y se han registrado marchas pacíficas en Puno, departamento fronterizo con Bolivia, en Cuzco y también en Andahuaylas.

Ni autoridades ni medios locales han informado, hasta el momento, sobre incidentes o disturbios en estos puntos.

Al respecto, el nuevo primer ministro peruano, Alberto Otárola, afirmó, tras una reunión del Consejo de Ministros, que la violencia que se presentó durante las manifestaciones «ha ido menguando en su intensidad» y que ahora tienen un mandato para «restablecer plenamente el orden público».

El nuevo gabinete iniciará un «amplio proceso de diálogo y concertación nacional» para salir de la actual crisis política, pedir el voto de confianza del Parlamento y gobernar en esta etapa de transición, ya que el Ejecutivo y el Congreso han aceptado adelantar las elecciones generales en el país para abril de 2024, según declaró el jefe del Gabinete. (EFE)