Grecia suaviza la exigencia de certificado sanitario

Miles de trabajadores sanitarios griegos se manifestaron contra las suspensiones aplicadas a los no vacunados.

El cambio en la normativa permite que los trabajadores de la salud suspendidos vuelvan a sus cargos con una dosis anticovid.

Redacción ATENAS

El nuevo ministro de Sanidad griego, Thanos Plevris, suavizó este jueves la ley que deja sin empleo y sueldo a los profesionales de la salud que no se vacunan. Esto con la esperanza de evitar prescindir de 10.000 trabajadores en un momento en que el avance de la pandemia vuelve a poner contra las cuerdas el sistema sanitario.

Plevris, quien asumió el cargo el miércoles, anunció que la ley no tiene un carácter «punitivo» y que por ello todo el personal que se ponga la primera dosis podrá volver inmediatamente a trabajar, siempre y cuando se comprometa a que también se podrá el segundo pinchazo.

La ley que entró en vigor anteayer preveía inicialmente que todo el personal de hospitales y centros de salud debía estar vacunado el 1 de septiembre con la pauta completa.

El miércoles mismo fueron entregadas casi 6.000 cartas de suspensión laboral de un total de 10.000 personas que hasta ayer seguían sin vacunar, lo que representa el 10% del personal sanitario.

Por ello, el sindicato del personal sanitario de hospitales públicos (POEDIN) realizó ayer una huelga de cinco horas y manifestaciones en varias ciudades del país, que fue secundada por miles de trabajadores. EFE

Las suspensiones de empleo y sueldo se producen en un momento de agotamiento del personal sanitario que lleva casi 20 meses dando la batalla contra la covid y se añaden a las enormes deficiencias de la salud pública -de los 125.000 puestos hospitalarios necesarios, solo están ocupados 92.000, según recordó hoy la Federación de Asociaciones de Médicos Hospitalarios de Grecia (OENGE)-.

El Ministerio de Sanidad anunció hace algunos días que mientras se contrata a personal de sustitución, se cubrirían las vacantes con la redistribución de personal de los hospitales; la fusión de clínicas y departamentos; la sustitución de los suspendidos por personal auxiliar, así como alianzas con el sector privado para los servicios de apoyo, como catering, almacenamiento, etc.

Grecia es uno de los pocos países que ha recurrido a este drástico método para dar un impulso a la campaña de vacunación, que lleva semanas avanzando poco.

Hasta el momento, el porcentaje de vacunados con la primera dosis alcanza alrededor del 57%, mientras que en torno al 54% tiene ya la pauta completa.

En las últimas semanas, la cifra de contagios ha aumentado drásticamente, con una media de 3.000 casos diarios -en una población de algo menos de 11 millones- pero también la cifra de intubados y fallecidos se ha incrementado. EFE