Templo quemado en Nica

ATAQUE. El viernes, un persona prendió fuego una histórica imagen de la Sangre de Cristo, una de las más veneradas en el país centroamericano, en una iglesia de Managua. EFE
ATAQUE. El viernes, un persona prendió fuego una histórica imagen de la Sangre de Cristo, una de las más veneradas en el país centroamericano, en una iglesia de Managua. EFE

Redacción MANAGUA

La Iglesia Católica en Nicaragua sufrió 24 ataques en los últimos 20 meses, incluyendo el incendio que calcinó una histórica imagen de la Sangre de Cristo en la Catedral de Managua, afirmó este sábado la ONG Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), que responsabilizó al Gobierno.

La denuncia del Cenidh incluye el caso de una mujer que roció con ácido la cara de un sacerdote, el encierro de nueve días que aplicó la Policía a un padre en su parroquia tras cortar los servicios de agua y luz, la retención de un grupo de mujeres en la Catedral de Managua y la destrucción o robo de imágenes.

Violación a DDHH

«Estos ataques a la Iglesia Católica confirman que el régimen Ortega Murillo quebranta el derecho a la libertad de conciencia, de pensamiento, y de religión, establecidos en la Constitución de Nicaragua y la Declaración Universal de Derechos Humanos», indicó el informe.

«Queda claro que el régimen, junto a sus fuerzas armadas, policías, paramilitares y hasta fanáticos, acosan, intimidan y atacan, ya no sólo a las sociedad civil que asiste a los templos», agregó el Cenidh.

Represalia por críticas

El clero de Nicaragua se distanció de Ortega en 2018, tras el estallido de una ola de manifestaciones antigubernamentales que, de acuerdo con cifras de organismos humanitarios, dejaron cientos de muertos, miles de heridos y decenas de miles en el exilio.

El presidente de Nicaragua, quien ha explicado que se defendía de un «golpe de Estado fallido», ha insistido en llamar «golpistas» a los religiosos.

El organismo concluyó que «persiste la impunidad en estos actos terroristas en los templos católicos, debido a que son perpetrados por aliados del régimen».

Rechazan informe policial

La Policía de Nicaragua emitió un informe sobre el incendio, en el que descartó que fuera provocado, y describió el escenario propicio para un accidente, incluyendo la presencia de un atomizador con alcohol y la base de una veladora, en concordancia con la versión emitida previamente por la vicepresidenta y primera dama Rosario Murillo.

El cardenal Leopoldo Brenes en Nicaragua, el papa Francisco en el Vaticano, sacerdotes y denominaciones religiosas de Latinoamérica y Europa, coincidieron en llamar «atentado» o «acto terrorista» al incendio del pasado viernes.