Redacción SALVADOR
EFE
Uno, estático y expectante primero y encendido después. El otro, movedizo, preciso y peligroso desde el primer minuto.
James Rodríguez ganó a Lionel Messi el duelo de los diez en el partido Argentina contra Colombia de ayer en el estadio Arena Fonte Nova de Salvador.
James y Messi fueron los jugadores más aplaudidos y vitoreados por los aficionados cuando las alineaciones fueron anunciadas en el estadio.
El centrocampista colombiano se movió principalmente por el centro, en la típica posición del enganche, y buscó asociarse sobre todo con Radamel Falcao y Juan Guillermo Cuadrado.
Messi, en cambio, se paró como segundo delantero, detrás de Sergio ‘Kun’ Agüero y delante de los cuatro centrocampistas: Giovani Lo Celso, Guido Rodríguez, Leandro Paredes y Ángel Di María.
James fue uno de los mejores jugadores del primer tiempo, que tuvo a Colombia como dominador.
Messi, en cambio, estuvo estático y pasó desapercibido.
Los defensas argentinos acrecentaron poco a poco la presión sobre James, pero este aprovechó para dar pases de primera y descolocar a sus marcadores.
Los roles se invirtieron al comienzo de la segunda mitad: Messi empezó a crecer y James no tuvo mucho contacto con la pelota.
El delantero del Barcelona protagonizó las principales jugadas ofensivas de la ‘Albiceleste’ y los defensas colombianos tuvieron que apelar a lo legal y lo ilegal para detenerlo.