Le dan vida y color a un patrimonio de Babahoyo

PANORAMA. Con una mano de pintura y diseños originales, las viviendas fueron mejoradas en cuanto a su fachada.
PANORAMA. Con una mano de pintura y diseños originales, las viviendas fueron mejoradas en cuanto a su fachada.

Durante el fin de semana siete casas flotantes recibieron mejoras en su fachada.

Redacciòn BABAHOYO.

El equipo activista de RescatArt junto con el Ministerio de Turismo (Mintur) y grupos de ayuda social de Los Ríos realizaron la segunda Jornada Acuática de Arte al Aire Libre en las casas flotantes del río de Babahoyo.

El evento se efectuó en las instalaciones de Casa de Olmedo ubicada en la hacienda La Virginia, en el margen derecho del afluente.

Jazmín Alvarado, representante de RescatArt y parte de la organización, comentó que hace algún tiempo ya se había dado la iniciativa, pero en esta ocasión la decisión fue de los habitantes de las pocas viviendas flotantes que aún permanecen.

Objetivo

Alvarado comentó que los moradores del sitio dieron a conocer la propuesta porque piensan que en algún momento pueden ser desalojados y quisieron que los ayuden. “Entonces junto a mi compañero Ángel Olaya acudimos y desde enero hemos venido planificando el proyecto”, dijo.

El propósito es llenar de colores y vistosidad las riberas del río, embelleciendo las tradicionales viviendas para promover visitas de turistas nacionales y extranjeros en la capital fluminense, pero además levantar la autoestima de los habitantes.

La pintura fue donada por varias empresas públicas y privadas de la localidad, con lo que, de acuerdo a la planificación, esta vez se pintaron siete viviendas y algunos muros de la Casa de Olmedo. “Hemos escuchado que nos van apoyar para intervenir en otra jornada. La meta es pintar las 27 casas”, comentó la activista cultural.

LABOR. Los trabajos se desarrollaron de manera conjunta entre la ciudadanía e instituciones involucradas.
LABOR. Los trabajos se desarrollaron de manera conjunta entre la ciudadanía e instituciones involucradas.

Labor

De Cuenca, Quito, Guayaquil y Santa Elena llegaron los artistas para plasmar en cada una de las residencias los murales que rescatan la ancestralidad.

Carlos Romero, investigador, activista cultural y miembro de la Casa de la Cultura de Los Ríos, hizo referencia a la Balsa Blanca. Indicó que deben construirla ya que es patrimonio de la cuidad. “La iniciativa es encomiable, digna de aplaudirla y respetarla. Este tipo de trabajos que hacen los jóvenes es muy bueno para rescatar nuestra identidad”, dijo.

Flavio Lozano, quien desde hace 20 años lleva viviendo en una de las casas flotantes, a altura de la avenida Jaime Roldas, expreso: “Todos los vecinos estamos totalmente contentos, gracias a todas las instituciones que se han unido a esta noble causa. Ojalá se haga turístico para nosotros va hacer un gusto atender a las personas que lleguen a visitar este lugar”, manifestó. (GCG)