BABAHOYO
Hace más de un año, justo después de que los buses de transportación urbana empezaran a ingresar a las parroquias urbanas Barreiro y El Salto, la situación para los canoeros se ha tornado difícil.
Así lo asegura Julio Mena, quien hace 25 años se dedica a transportar personas por los afluentes de la capital, a través de su canoa. “Ya nada es como antes. El punto es que muchos ciudadanos que viven cerca de los ríos ya no hacen uso de este tradicional transporte”, dijo el hombre de 70 años.
Realidad
El ciudadano manifestó que hasta hace cinco años ‘el negocio’ dejaba ganancias, pero en la actualidad muchas veces no saca ni para el almuerzo.
De igual forma, Ronald Cortez cuenta que este factor ha motivado a que sus colegas opten por buscar nuevas oportunidades de trabajo.
“Actualmente solo quedamos quienes por muchos años trabajamos en esta actividad, pues a nuestra edad nadie nos da trabajo. Créame que con lo poco que se gana aquí, en ocasiones no alcanza ni para llevar el alimento al hogar”, lamentó.
Cuenta que hay compañeros que aunque ya fallecieron, dejaron su legado para que esta tradición no desaparezca, sin embargo, por como está el panorama, creen que ya no pueden continuar.
Su situación
Los canoeros, quienes por lo general inician sus labores desde las 06:00 hasta las 18:00 o 19:00, coinciden que en las 12 horas de trabajo alcanzan a juntar un total de 10 dólares.
“Eso solo me alcanza para el desayuno de mis hijos. Hay días en los que incluso los pasajeros no pagan el valor completo. Los usuarios nos saben dejar de 0,10 a 0,15 centavos cuando el costo es 0,25”, lamentó Juan Naranjo, quien desde niño se ha dedicado al oficio del ‘canalete’.
Los aproximadamente 30 canoeros que laboran en Barreiro y El Salto, se niegan a desaparecer, por ello, esperan que la ciudadanía continúe usando este servicio. Además requieren el apoyo de las instituciones públicas vinculadas al turismo para poder mejorar la imagen de sus vehículos acuáticos y así atraer más a los turistas fluviales. (NDA)
Lugar de canoeros
En el malecón, a la altura de la calle 27 de mayo, Calderón y cerca del centro gerontológico, se ubican los canoeros para brindar su servicio a quienes vayan a las parroquias El Salto, Barreiro y viceversa.