BABAHOYO.
Afanados y llenos de esperanzas los comerciantes levantaron las tradicionales ‘barracas’ para iniciar con la venta de los dulces, alimentos, ropa, artesanía y demás artículos en el marco de las festividades patronales de Babahoyo.
Los primeros en llegar fueron los comerciantes del cantón Otavalo, provincia de Imbabura, quienes mostraron seguridad y convicción de que este año les irá mejor que el anterior pese a la situación económica del país.
Así lo sostuvo Cecilio Tizalema, pues señaló que entendiendo los problemas financieros han decidido manejarse con los mismos precios del año pasado. “Estamos mayormente comercializando ropa abrigadora y artesanías, por lo general eso suele ser un poquito costoso, sin embargo, este año pondremos los precios al bolsillo de la ciudadanía porque ellos necesitan comprar y nosotros vender”, refirió el hombre de 42 años de edad, mientras organizaba su mercadería.
Por su parte, Mirian Gonzalez, quien durante las festividades expenderá el apetecido yapingacho, dijo que los precios no superarán los tres dólares. “Tengo más de 10 años visitando esta ciudad, pero le tengo un cariño bonito a esta población, así que no vamos a dejar que nadie se quede con las ganas de servirse este rico plato con sabor ambateño”, afirmó la fémina.
Desarrollo
Según el jefe del Departamento del Departamento de Vía Pública del Municipio, Julio Franco, los comerciantes solo podrán estar expendiendo sus productos hasta el próximo martes. “La mañana del miércoles ya nadie podrá continuar allí, el permiso es sólo hasta el 26 de septiembre”, enfatizó.
No obstante, explicó que los sitios utilizados por los aproximadamente 800 mercaderes son los mismos del año anterior, es decir, que se ubicarán en las calles Sucre, Bolívar y Abdón Calderón comprendido desde las avenidas Juan X. Marcos hasta la Custodio Sánchez.
El funcionario destacó que este año también se optimizarán los espacios para mayor comodidad tanto para comerciantes como para los cientos de babahoyenses y visitantes que vendrán a disfrutar de las fiestas patronales; por lo que se ha reservado espacio desde la calle hasta las aceras.
Carruseles
Por otra parte, los carruseles ya están prácticamente armados para recibir a los miles de jóvenes que gustan en abordar estos aparatos de diversión.
Ayer los operadores de estos juegos terminaban de realizar el montaje de las pesadas estructuras mecánicas que deberán superar el proceso de revisión que garantice la seguridad de los usuarios y, así evitar accidentes futuros.
Además ya se agotaron los espacios de vía pública que la Municipalidad designó para los comerciantes. (NDA)
