Los motorizados cuentan que varias veces han sido amenazados por los pillos.
BABAHOYO • Tatiana Cataño es ingeniera en sistemas, pero desde hace cinco años, por la falta de un empleo decidió emprender en el negocio de entregas a domicilio. “hasta ahora es así como se gana el pan diario. El servicio de delivery está de moda. Este es el único servicio mediante el cual los restaurantes puedan ofrecer lo que preparan en el toque de queda”, indicó Cataño.
Al igual que ella, se han sumado varias personas a esta labor, que les permite vender sus productos; y a la ciudadanía complacerse de algún gusto, desde la comodidad de su casa, o una necesidad que por falta de tiempo no lo puedan hacer, como por ejemplo, el pago de los servicios básicos.
Pero no todo es color de rosa para quienes hacen las entregas a domicilio, pues el vehículo que usan estas personas son las motocicletas, que son muy atractivas para los amigos de lo ajeno.
Testimonios
Hace unos días, un joven que trabaja en un supermercado, atendió un pedido por el sector de la Réplica en Babahoyo, pero al momento se hacer la entrega, fue amedrentado por dos sujetos, quienes con un arma blanca lo despojaron de su moto. El joven no presentó la denuncia, porque los pillos tomaron contacto con la víctima, y le pidieron la cantidad de 200 dólares para entregarle la motocicleta.
En Quevedo, más de 40 personas se dedican a las entregas a domicilio. Ellos se quejan ante la inseguridad que se palpa en las calles, pues varios de los repartidores han sufrido un atraco. Lilibeth Yépez, exigió al alcalde de la ciudad, John Salcedo, que les den seguridad, porque se sienten a merced de la delincuencia.
“No podemos trabajar, detrás de cada uno de nosotros existe una familia, y no es justo que venga un desconocido y nos robe el trabajo de nuestro esfuerzo”, exclamó la ciudadana.
Joel Saona, también realiza este servicio, pero prefiere ir acompañado de algún amigo, cuando hace sus entregas. Tiene miedo que lo asalten, o peor aún, que le arrebaten su vida, sin embargo, hay lugares alejados a la urbe, que prefiere no visitar.
Ante tal situación, el jefe de la Policía de Los Ríos, Rafael Añasco, indicó que, hasta la fecha no se han reportado delitos por robo a motocicletas de repartidores e instó a los afectados a que pongan la denuncia. (MAR)
EL DATO En Quevedo, quienes realizan el servicio de delivery, evitan visitar por las noches parroquias como: la 24 de Mayo, Nicolás Infante Díaz, Viva Alfaro, porque son sectores de alta peligrosidad.
El dato Las tarifas de este servicio varían desde $1,50 hasta 3 dólares, depende la distancia y ubicación del cliente que solicita el pedido.
TOME NOTA Los repartidores prefieren no tomar pedidos de las ciudadelas alejadas del centro de Babahoyo, por ejemplo, no acuden a Puertas Negras, La Ventura, El Salto, Barreiro y el Cruce de Chilintomo, porque los consideran peligrosos.