Demandan mejorar el servicio de telecomunicaciones ante constantes fallas
QUEVEDO. Mario C. lleva casi tres meses con problemas en la cobertura de su operadora de telefonía móvil, afectando su conexión a internet y de llamada. El usuario, residente en la parroquia Venus del Río Quevedo, cuenta con un plan de datos de $25 mensuales, pero asegura que, a pesar de la deficiencia en el servicio, sigue pagando la misma tarifa, e incluso en ocasiones le han cobrado hasta $28 o $30.
«No entendemos por qué ocurre esto. Hemos llamado al servicio de atención al cliente al 611 y solo nos dicen que no tienen registro del problema, que ya se está solucionando, pero seguimos sin servicio. Algunos vecinos han reportado lo mismo, incluso desde hace más tiempo», relató el ciudadano.
Tania Lorenty, quien también vive en este sector urbano de Quevedo, señaló que la señal de su operadora es intermitente: a veces funciona durante cinco o siete horas y luego desaparece. Lo más extraño, según ella, es que algunos de sus familiares, que usan otras compañías, sí tienen cobertura estable.
«La verdad es que no entendemos qué está pasando. Hemos ido hasta la oficina de la operadora para reclamar, pero solo nos dicen que esperemos. Las autoridades deben intervenir para exigir respuestas y soluciones, porque como usuarios no nos escuchan», manifestó la ciudadana.
Los afectados piden que las empresas de telecomunicaciones y las entidades de control tomen medidas urgentes para garantizar un servicio de calidad y transparente para los usuarios.
Habitantes de este sector aseguran que la falta de señal afecta únicamente a una de las tres operadoras que operan en Quevedo. Desde la empresa, argumentan que el problema se debe a fallas en la red, mientras que en otras ocasiones atribuyen la situación a la restricción de señal en el Centro de Rehabilitación Social de Quevedo, ubicado en el kilómetro 1 ½ de la vía a Santo Domingo, en los límites con la parroquia Nicolás Infante Díaz.
«Nos dicen que es por la cárcel y otras veces que el problema afecta a todas las operadoras de telefonía móvil e internet, pero eso no es cierto, solo ocurre con una. Vamos a reclamar y todo sigue igual», señaló Gustavo Arana, residente de la parroquia Nicolás Infante Díaz, donde los inconvenientes persisten desde hace un mes.
Podrían exigir compensación por falta de señal
Milton García, abogado en libre ejercicio, señala que, en caso de comprobarse la causa del problema que deja sin señal a los sectores de las parroquias Nicolás Infante Díaz y Venus del Río, los usuarios podrían exigir el restablecimiento del servicio o, en su defecto, solicitar que no se les cobre hasta anular los contratos. Sin embargo, enfatiza en la necesidad de identificar el origen del inconveniente.
El abogado explicó que la situación podría estar relacionada con la reciente solicitud del Gobierno Nacional de suspender el servicio de internet en las cárceles, planteada el pasado 27 de marzo y respondida en un comunicado por la Asociación de Empresas de Telecomunicaciones (Asetel).
“Algún usuario o un grupo de usuarios de la operadora afectada debería presentar una denuncia ante la Fiscalía por el servicio no prestado y exigir respuestas. Mientras tanto, esto sigue siendo solo un rumor. Las autoridades también deben solicitar explicaciones, ya que no se puede pagar por un servicio que no se recibe ni que funciona a medias. Además, los representantes de la Defensoría del Pueblo deberían intervenir para defender los derechos de los usuarios”, manifestó el abogado.
No es viable apagar señales de telecomunicaciones
En su comunicado, emitido el jueves 27 de marzo de 2025, Asetel explicó que «no es factible apagar las señales de las redes de telecomunicaciones en dichas áreas sin afectar a la comunidad y sus actividades productivas». Esta afirmación responde a la presencia de inmuebles y viviendas en los alrededores de centros de rehabilitación, como la Penitenciaría, que dependen de estos servicios, lo que dificulta la restricción de la señal.
El mismo problema podría estar presentando poblaciones cercanas en la cárcel de Quevedo, lo que ha llevado a los ciudadanos a solicitar desde hace algunos años al Gobierno Nacional la reubicación del centro penitenciario para preservar la calidad de los servicios en la comunidad.
Asetel también propuso alternativas para que las autoridades del Gobierno Nacional, ante los cuestionamientos sobre la cobertura en las cárceles del país, puedan regular el uso de internet en estos centros sin afectar el acceso de la comunidad a los servicios de telecomunicaciones.