La pandemia del coronavirus impide a Vilcabamba celebrar sus fiestas.
Vilcabamba. El Valle de la Longevidad, ubicado a 41 kilómetros del sur de la ciudad de Loja, conmemora este 29 de mayo un año más de vida política.
La pandemia del coronavirus no permite que sus habitantes puedan conmemorar por todo lo alto, pero sí recuerdan y hacen alusión a esta importante fecha.
Carlos Ortiz, presidente de la parroquia, dijo que la emergencia que vive en país por el Covid-19 movió y trastocó la programación que tenían prevista, por cuanto a través de sus plataformas virtuales recordarán y harán alusión a la fecha, durante este día.
Además, dijo que se recordará el trabajo desempeñado durante este último año y reiterará el compromiso de trabajo y gestión para el desarrollo de Vilcabamba.
Tienen una ardua tarea que cumplir para levantar el turismo en la parroquia, ya que debido a la pandemia se ha visto muy afectada al ser un sector donde la mayoría de sus habitantes viven del turismo.
Desde que el cantón cambió a semáforo amarillo de poco empezó a reactivarse. Coordinan acciones con las autoridades para poder afrontar esta situación.
Atractivos
Los fines de semana eran muy concurridos en Vilcabamba, cientos de turistas que desde diferentes lugares llegaban para disfrutar de su enigmático clima y sus especies naturales. Está bañada por los ríos Chamba y Uchima y se ubica a los pies del cerro Mandango, que tiene una altura de 1.200 m y es considerado sagrado por los habitantes de la parroquia.
Cabe destacar que en Vilcabamba viven personas que sobrepasan los cien años de edad, por esta razón se lo conoce como “El valle de la longevidad”. Por este motivo los turistas llegan con la intención de ganarle años a la vida.