A más de polvareda y lodo, ha proliferado la venta ambulante. Tienen otras dificultades.
Desde que se llega al mercado del Pequeño Productor, ubicado al norte de la ciudad, se nota la desatención en el lugar. Las calles están polvorientas y con grietas, a medida que se ingresa se observa personas libando o dormidas en las aceras. También se evidencian vehículos estacionados donde se les ocurre a los conductores.
Esta situación empeora los fines de semana, según comentaron algunos adjudicatarios, pues aseguran que la venta informal se prolifera a partir de la tarde del viernes hasta el domingo, incluso es bastante complicado circular por el lugar.
Venta de ropa
Son alrededor de 12 locales en donde venden ropa usada. Cuentan que hace un poco más de un año los vendedores informales se tomaron las calles y no hay control a pesar que han denunciado. Eso lo confirman incluso mostrando un video.
Rocío Ordóñez, una de adjudicatarias, dice que la situación es preocupante, “pagamos arriendo, guardia, luz y no se vende nada”. El problema insiste es los fines de semana ya que llegan unas 30 personas y ubican los puestos de venta de ropa a placer.
“Les dijimos que también nos dejen vender ahí y nos dicen que nos van a multar, pero no hacen nada por encontrar una solución”, reclama.
Ventas disminuidas
Carmen Machuca, quien lleva unos 12 años vendiendo en el lugar, es enfática en mencionar “todo lo que conseguimos es por nosotros, el Municipio poco nos ayuda”. Al tiempo indica que están preocupados porque conocieron que les van a subir el valor mensual que deben pagar por los espacios e incluso les dijeron que deben firmar una garantía.
Otra de las adjudicatarias coincidió en que reciben poco apoyo, “los socios pusimos parte del techo e incluso hasta la luz”, aseguró.
Ellas tienen puesto en la parte última y son parte de la Asociación de Expendedores de Productos vitales ’20 de Diciembre’. Cuentan que los fines de semana se amontonan los vendedores informales en las vías y pocas personas acuden al área en la que se encuentran.
Trabajo
Roberto Guarderas Espinoza, coordinador de Mercados del Municipio de Loja, afirma que el centro de abasto fue construido de forma provisional, ya que la intención es ubicarlos en el Puerto Seco Comercial.
“A futuro cuando se construya el Puerto Seco deberán trasladarse ya que es un área verde de la ciudadela y por eso tiene es tipo de infraestructura”, recalca. Referente a los controles dice que hay cinco inspectores, el administrador y una secretaria; y que reciben el apoyo de la Policía Municipal y de los Agentes de Tránsito. (DVL)
EL DATO
Este centro de abasto suministra los productos a los cinco mercados urbanos que hay.
LA CIFRA
15 AÑOS Aproximadamente tiene el centro de abasto.