Democracia y dictadura

Santiago Pérez Samaniego

En contraposición a la democracia o gobierno del pueblo, el autoritarismo o la dictadura son formas de administración del Estado donde un individuo o un partido único concentran todo ese poder.

El autoritarismo se aleja de la esencia de autoridad, se caracteriza por un poder altamente concentrado y centralizado mantenido por la represión política y la exclusión de posibles detractores.

El autoritarismo era un sistema clásico de las monarquías europeas que creían que la autoridad y el poder les eran otorgados de forma divina y se perpetuaban por herencia. Este sistema establece una forma de organización jerárquica, cuya base es la desigualdad y la exclusión de la sociedad en la toma de decisiones públicas, para lo cual no se dudaba en ejercer la coerción como medio de control. El autoritarismo utiliza a los partidos políticos y organizaciones de masas para movilizar a las personas en torno a los objetivos del régimen.

La dictadura, por su lado, originalmente surgió como una institución jurídico-política en la antigua Roma, que se hacía presente solo cuando existían peligros externos (guerras) o conmociones internas (crisis de gobierno); es decir, se nombraba de acuerdo a procedimientos y límites señalados por la ley y por un tiempo limitado, a una persona con poderes extraordinarios (el dictador) en virtud de una situación excepcional, esta última era llamada por los romanos estado de necesidad y que se conoce hoy como estado de excepción.

Contemporáneamente el significado de dictadura difiere de su concepción clásica. Hoy se entiende por dictadura al gobierno que se establece en situaciones de ingobernabilidad donde conjugan causas de carácter político, jurídico, económico o ideológico en el que una persona dicta todas o las más importantes decisiones políticas del Estado.

La persona, llamada dictador, es quien usurpa y reúne en sus manos todos los poderes del Estado y los ejerce autoritariamente y sin limitaciones jurídicas, éticas, ni temporales. Aunque resulta increíble, en pleno siglo XXI, vivimos tiempos de dictaduras. (O)

Twitter: @santiagojperezs